La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha asegurado hoy que PP y Ciudadanos no van a impedir que el Gobierno presente sus presupuestos a finales de noviembre o principios de diciembre, a pesar de los intentos de ambos partidos por frustrar la tramitación de las cuentas del Estado.
En declaraciones a EFE, la ministra ha acusado al PP y Ciudadanos de "secuestrar la voluntad del Parlamento y de impedir el ejercicio de la soberanía popular" con la "pinza" que han hecho para tumbar la enmienda socialista que pretendía quitar al Senado la capacidad de veto de la senda déficit.
"No es al Gobierno a quien hacen daño", ha afirmado Montero, que ha añadido que el daño se lo están infligiendo a "pensionistas, niños y enfermos", que serían los beneficiarios de un mayor margen presupuestario para la Seguridad Social y las Comunidades Autónomas.
Montero ha destacado que en los últimos cuarenta años no se ha producido en el Congreso una situación similar a la que ahora está propiciando PP y Ciudadanos, de quienes ha asegurado que no tienen "el más mínimo nivel de ética política".
La ministra les acusa de no querer que se revitalice el Estado del bienestar y de apostar por un debilitamiento de lo público para dar paso a la iniciativa privada.
Bruselas ya ha dado el visto bueno
A su juicio, no se entiende de otra manera que traten de impedir a toda costa la tramitación de unos presupuestos más expansivos cuando Bruselas ya ha dado su visto bueno a un mayor margen fiscal.
Ha insistido en que para los Presupuestos Generales del Estado de 2019 el mantener la senda de déficit del PP solo supondrá una décima de diferencia (1.200 millones de euros), mientras que para las Comunidades Autónomas y la Seguridad Social implicará cuatro décimas que les restarán una capacidad presupuestaria de casi 5.000 millones.
Montero confía en poder tener cerrado el "esqueleto presupuestario" para el 15 de octubre, fecha en la que el Gobierno debe remitir su plan presupuestario a Bruselas, en el que quedará "demostrado" que el Ejecutivo socialista cumple con las exigencias fiscales europeas.
Otra cosa son los apoyos parlamentarios a los Presupuestos, con unas negociaciones abiertas con Unidos Podemos que "avanzan", según la ministra, que confía en que se puedan sumar el resto de formaciones políticas, salvo las que se han "autoexcluido" y están "instaladas en la rabieta", en referencia al PP y Ciudadanos.