La edad media de los profesores de los centros educativos españoles es de 46 años. La cifra sitúa al país entre los miembros y economías de la OCDE cuya población docente ha experimentado uno de los envejecimientos más pronunciados, según destaca el Estudio Internacional sobre la Enseñanza y el Aprendizaje TALIS 2018, que ha sido presentado este miércoles por la organización.
El promedio de edad de los profesionales del sector en los países de la OCDE está en 44 años, pero la institución advierte de que la proporción de docentes de 50 años o más en España ha aumentado en siete puntos porcentuales desde 2008. Así, el 36% de los docentes de los centros públicos, concertados y privados españoles se ubican en esa franja frente al 34%. "España tendrá que renovar alrededor de tres de cada ocho miembros de su personal docente durante la próxima década", advierten.
Sin embargo, con los directores ocurre a la inversa. En promedio, tienen 50 años de edad, por debajo de la edad media de los directores del conjunto de países y economías que participan en TALIS y que asciende a 52 años de edad. "El 9% de los directores en España tienen 60 años o más, en comparación con el 20% en promedio en la OCDE", reflejan los autores del informe. Además, concluyen que los directores tienen una media de 7 años de experiencia laboral, tres años menos que el promedio de los miembros de la organización.
Con los directores ocurre a la inversa. En promedio, tienen 50 años de edad, por debajo de la edad media de los directores del conjunto de países
En cuanto a las prácticas de gestión del aula, la OCDE señala que España muestra una brecha particularmente amplia entre la proporción de docentes experimentados, es decir, con más de 5 años de experiencia, y la de docentes novatos con hasta cinco años de trayectoria: mientras que el 82% del primer grupo declara que se siente capaz de controlar conductas disruptivas en el aula, solo el 66% de los docentes principiantes se atreve a responder lo mismo.
El desequilibrio de género es menor en España. Solo el 49% de los directores de los centros educativos del país son mujeres, en comparación con el 62% de profesoras, pero si se compara con el promedio de la OCDE se observa que la cifra de directoras se reduce al 47% y la de profesoras se eleva al 68%. "En los últimos diez años, la proporción de profesoras ha crecido en España en cinco puntos porcentuales, lo que representa uno de los mayores incrementos entre los países y las economías con datos disponibles en TALIS", recoge el informe.
El reto de la inmigración
Ahora que la migración aumenta en muchos lugares del mundo, también en España, la OCDE advierte que a menudo los hijos de los inmigrantes que se incorporan al sistema escolar de sus países de acogida y requieren un respaldo específico por parte de sus centros educativos y profesores.
TALIS 2018 ha determinado que en los centros de enseñanza de los países de la OCDE dos de cada 10 profesores de educación secundaria obligatoria trabajan en un centro educativo en el que al menos el 10% del alumnado es descendiente de inmigrantes. "Los profesores deben estar preparados para trabajar con estudiantes que pueden no hablar con fluidez el idioma en el que se imparte la enseñanza", apuntan.
Sin embargo, el estudio señala que tres de cada 10 profesores en países de la OCDE afirman que no pueden hacer frente a los retos que plantea la enseñanza en aulas multiculturales y el 15% de los profesores de los países de la OCDE afirman que necesitan más formación en este ámbito.
Tres de cada 10 profesores en países de la OCDE afirman que no pueden hacer frente a los retos que plantea la enseñanza en aulas multiculturales
En España, el 26% de los docentes trabajan en centros educativos donde al menos el 10% de los estudiantes tienen origen migrante, mientras que el promedio de la organización es del 17%. A su vez, el 98% de los directores españoles declara que sus docentes "cree que los niños y jóvenes deberían aprender que las personas de diferentes culturas tienen mucho en común" frente al 95% de la OCDE.
El 22% de los docentes del país trabaja en escuelas con más del 10% de estudiantes cuyo primer idioma es diferente al idioma de instrucción. Sin embargo, desde 2008, España ha experimentado una disminución de 16 puntos porcentuales en la proporción de docentes que trabajan en escuelas con una gran diversidad lingüística, lo cual es una de las caídas más pronunciadas entre los países y las economías con datos disponibles en TALIS.
Necesidades educativas especiales
Pero los docentes no solo reclaman mayor formación para afrontar el reto migratorio. También la exigen en el ámbito de la educación especial. En España, el 19% de los docentes trabajan en aulas con al menos el 10% de los alumnos con necesidades educativas especiales, es decir, aquellos diagnosticados con una necesidad especial de aprendizaje porque tienen una discapacidad mental, física o emocional. La cifra es inferior al promedio en los países y economías de la OCDE que participan en TALIS (27%).
Solo el 35% de los docentes del país ha recibido formación para enseñar en clases con grupos de distintas capacidades como parte de su educación formal
Sin embargo, solo el 35% de los docentes del país ha recibido formación para enseñar en clases con grupos de distintas capacidades como parte de su educación formal inicial frente al 62% de la OCDE. Mientras que en España solo el 28% de los docentes reconoce haberse sentido preparado para enseñar en dichos entornos cuando terminaron sus estudios, este promedio escala al 44% en el conjunto de los países particpantes en el estudio.
En los últimos cinco años, tanto la participación como la necesidad de formación para enseñar a estudiantes con necesidades educativas especiales han aumentado en España. En este sentido, el 25% de los directores afirma que la calidad de la enseñanza en su centro educativo se ve mermada por la falta de personal competente para enseñar a estudiantes con necesidades educativas especiales.
Baja el acoso escolar
En cuanto al clima del aula, las relaciones entre estudiantes y docentes son positivas en general, con un 96% de docentes en España que están de acuerdo con la afirmación "los docentes se llevan bien con los estudiantes".
El 5% de los directores declara comportamientos de intimidación o acoso escolar entre sus estudiantes, proporción que es casi tres veces más alta en el promedio de la OCDE (14%).
El 5% de los directores declara acoso escolar entre sus estudiantes, proporción casi tres veces más baja que en el promedio de la OCDE
Según el informe, la proporción de directores que declaran que la intimidación física y no física tienen lugar en sus centros al menos semanalmente ha disminuido en más de seis puntos porcentuales desde 2013.
Cabe destacar que los docentes españoles muestran una particularidad con respecto a sus colegas de la OCDE: priorizan menos el aumento de sus salarios. Por primera vez, el estudio ha pedido al profesorado de la OCDE que prioricen una serie de temas imaginando que pudieran incrementar el presupuesto educativo.
Prioridades
En promedio, en todos los países de la OCDE, la prioridad número uno es reducir el tamaño de las clases mediante la contratación de más personal y, en segundo lugar, mejorar los salarios de los docentes. De hecho, aumentar los salarios recibió una alta calificación en la mayoría de los países y economías participantes en TALIS.
Sin embargo, en España, menos de la mitad de los docentes señala que la mejora de los salarios es una alta prioridad y tampoco figura dentro de las áreas de mayor prioridad a la hora de disponer de un presupuesto adicional.
En España, menos de la mitad de los docentes señala que la mejora de los salarios es una alta prioridad
En cambio, las tres principales áreas priorizadas por los docentes españoles son la reducción del tamaño de las clases, ofrecer formación continua de alta calidad y apoyar a los estudiantes con necesidades educativas especiales.
La nueva edición del Estudio Internacional sobre la Enseñanza y el Aprendizaje TALIS 2018, en el que la OCDE indaga la opinión de docentes y directores de centros educativos de 45 países. En España, han participado un total de 803 colegios entre marzo y abril del año pasado.