Patxi López se ha dirigido hoy, sobre todo, a los 170.000 militantes del PSOE, los que tendrán la última palabra en las primarias de mayo, para comprometerse con ellos en la elaboración de un proyecto claramente de izquierdas bien diferenciado del que está desarrollando desde el Gobierno el Partido Popular. "Mi objetivo es unificar el PSOE, hace falta renovarlo con un proyecto claramente de izquierdas. Hay que acabar con la tensión interna. Quiero crear un equipo fuerte. Me creo con fuerza para reconstruir y unir al partido, asumiendo todo nuestro legado con los aciertos y errores".
Además de los mensajes dirigidos a los afiliados que hasta ahora han sintonizado con Pedro Sánchez, López también lo ha hecho a la poderosa federación andaluza que controla Susana Díaz. "Quiero un liderazgo colectivo, en el que todos cuenten. Me gustaría sumar a Pedro y a miles de militantes, no voy a prescindir de nadie, el próximo congreso tiene que ser el de la unidad y no debemos salir de él con vencedores ni vencidos".
López ha anticipado que se opondrá a facilitar la aprobación de los Presupuestos estatales para 2017
Patxi López ha dado a entender que no hará pactos previos con la presidenta andaluza ni tampoco con Pedro Sánchez en el supuesto de que ambos presenten su candidatura. Su intención, pues, es aplicar este talante integrador después de conocer el resultado de las primarias. "Mi candidatura no es contra nadie, es a favor de todo el PSOE, yo ahora no vengo a hacer pactos, después ya se verá".
López también ha puesto atención en el miedo que provoca al resto de las federaciones socialistas el fuerte empuje de Susana Díaz y la posibilidad de que, si gana las primarias, haga una purga importante en el partido. "Nosotros no somos un movimiento asambleario, pero no somos presidencialistas", ha advertido en referencia al liderazgo tan personalista que defiende la andaluza.
El candidato ha insistido a los afiliados socialistas en la necesidad de promover "un proyecto sobre bases sólidas para volver al socialismo" y aplicar el programa de "una izquierda exigente" que combata las políticas de la derecha. La primera traducción práctica de este discurso contra el PP será, según ha precisado López, una apuesta contraria a respaldar los Presupuestos estatales que prepara el Gobierno para 2017. Al mismo tiempo, López ha recordado que se opuso a la abstención en la investidura de Mariano Rajoy, si bien ha apostado por hacer una oposición útil en asuntos relevantes como, por ejemplo, la reforma laboral, pero con el objetivo de tumbar la que hizo el PP en 2012. En este juego de equilibrios, ha apostado por ocupar un espacio propio "que diferencien al PSOE de la derecha".
En la presentación de su candidatura, López también ha establecido una diferencia clara con Susana Díaz: él no quiere que haya un divorcio entre el PSOE y el PSC. Si llega a la secretaria general, ha dicho, trabajará para que ambas organizaciones resuelvan en común el conflicto territorial, dentro de un "gran pacto por la concordia" que incluiría una reforma constitucional.
El exlendakari defiende que los 18.000 militantes del PSC participen en las primarias de mayo
La apuesta de López tiene, en parte, su explicación en su interés en que los 18.000 militantes del PSC participen en las elecciones primarias de mayo. "Supongo que nadie está pensando en excluir a los socialistas catalanes de este proceso. Si es así, me opondré radicalmente".