Pedro Sánchez ha reconocido este lunes que las conversaciones con Unidas Podemos para formar gobierno están encalladas, y admite haberse equivocado en su forma de llevar a cabo las negociaciones con el partido de Pablo Iglesias.
Por eso, con el propósito de enmendar la situación, el líder socialista ha confirmado en una entrevista en TVE que llamará este mismo jueves al líder morado para retomar la negociación, sea para formar "un gobierno de coalición o cooperación", dejando así la puerta abierta a la fórmula que siguen exigiendo a día de hoy desde Podemos.
El líder del PSOE ha admitido la posibilidad de otra investidura si fracasada la de julio.
Aun así, el presidente del Gobierno mantiene su posición y asegura que defenderá su propuesta de gobierno de cooperación con Podemos, al que sigue considerando "socio preferente". Su objetivo, ha dicho también, es constituir un Ejecutivo que no dependa de las fuerzas independentistas.
Ha insistido en las diferencias que separan a su partido del de Iglesias, en cuestiones como Cataluña. "Podemos hablar de presos políticos, mientras el PSOE defiende que no hay presos políticos, que hay políticos presos que, supuestamente, han cometido una serie de ilegalidades que están siendo dirimidas en el Supremo", ha ilustrado Sánchez.
Pedro Sánchez se ha referido también a la carta enviada este miércoles por un grupo de 66 diputados del PSOE para reclamar a Pablo Casado su abstención en la investidura de julio, que "no conocía", y ha dicho agradecer el gesto.
El líder socialista ha adelantado que el primer "acuerdo de país" que impulsará si es presidente es una reforma del artículo 199 del reglamento de investidura de la Constitución para superar situaciones de bloqueo como la actual, en línea con la demanda de los firmantes de la misiva de este miércoles.