El líder de Podemos, Pablo Iglesias, quiere que las siglas del partido aparezcan en las candidaturas para las elecciones municipales, autonómicas y europeas que se celebrarán en junio de 2019. "Podemos es el principal significante del cambio y el nombre de Podemos debe estar visible en todos los procesos electorales en los que nos presentemos", ha manifestado al comienzo de la reunión del Consejo Ciudadano Estatal -el máximo órgano entre asambleas- que celebra este sábado en Madrid para diseñar las líneas maestras de su estrategia.
Aún está casi todo por cerrar y ni siquiera han cerrado la fórmula de confluencia con la que concurrirán a las urnas. En cualquier caso, Iglesias ha dejado claro ante los dirigentes territoriales del partido que "en esa apuesta destacan a nivel estatal Izquierda Unida y Equo y Catalunya en Comú".
No ha mencionado, sin embargo, la situación en Andalucía, Galicia o la Comunidad Valenciana. "Me consta que en algunos territorios los encuentros con otras organizaciones son más difíciles y por eso quiero escuchar a los secretarios y secretarias generales para que me informen de la situación", ha asegurado.
Además, ha reconocido que podrá haber excepciones, "especialmente en los municipios en los que se han configurado gobiernos de cambio en los que participamos". Es decir, los grandes ayuntamientos como Madrid y Barcelona, donde se presentaron dentro de plataformas como Ahora Madrid, que llevaron al Palacio de Cibeles a Manuela Carmena.
La "regla general", ha dicho Iglesias, "debe ser que en las próximas elecciones la gente pueda votar a Podemos sin perjuicio de que nos presentemos con otras fuerzas políticas, todas ellas deban tener en los diferentes ámbitos la visibilidad que les corresponda". Esto es un claro guiño al partido de Alberto Garzón, que desde comienzos de año le apremia para cerrar un acuerdo-marco que aclare los términos de la alianza con IU.
Iglesias, que ha llamado a "sumar fuerzas desde la diversidad" y a la "confluencia con todas las fuerzas políticas hermanas", ha puesto en valor el "espíritu confederal que ya se ha construido en el Congreso, en el Senado y en algunos parlamentos autonómicos". Pero también ha advertido de que "ese espíritu no se puede quedar solamente en lo parlamentario y en lo electoral sino que tiene que servirnos para avanzar en un bloque de cambio".
En su discurso inicial, el secretario general del partido también se ha referido a la situación en Cataluña, donde ha remarcado el "agotamiento de la estrategia procesista" y ha asegurado que la crisis "va camino de crionizarse".
Por otro lado, ha pedido a su partido que se sume a la "primavera de movilizaciones" que se ha puesto en marcha en las calles con reivindicaciones como la de los pensionistas. "Tenemos que contribuir desde la modestia a ayudar y a empujar", ha indicado. No ha dejado tampoco de referirse a sus adversarios políticos como el PSOE y a la lucha desatada entre PP y Ciudadanos desde el pasado 21 de diciembre.