Menos de 24 horas. Ese ha sido el tiempo que ha tardado el Partido Popular andaluz (PP-A) en reaccionar al órdago que lanzó este jueves Vox en materia de violencia de género. La formación liderada por Juanma Moreno, que necesita los votos de Vox para conseguir la investidura y sellar así el fin de la hegemonía socialista en Andalucía, ya ha insinuado su primera concesión ante las exigencias de Vox.
Según informa El Mundo este viernes, el PP está dispuesto a "reforzar la normativa contra la violencia doméstica" para mejorar la protección de "los abuelos, las abuelas, los niños y los hombres" que sufren violencia en el ámbito familiar, asumiendo así parte del discurso mantenido hasta ahora por Vox. El próximo martes se reunirán ambos partidos para intentar llegar a un acuerdo de investidura.
Los populares, que estos días se mostraban confiados de que no habría problemas para lograr dicha investidura, han movido ficha rápidamente tras el órdago planteado por la formación de Santiago Abascal.
La oposición de Ciudadanos
Sin embargo, la apertura de un diálogo con Vox el próximo martes no garantiza que salga adelante la investidura, ya que la propuesta de Moreno sobre violencia doméstica llega tras el anuncio de Ciudadanos de que no habrá una mesa de negociación conjunta con los de Abascal y de que "no se va a mover nada" del acuerdo de 90 puntos que cerraron con los populares. Y, precisamente, Vox pretende una foto a tres bandas y renegociar parte del acuerdo.
El líder de Vox ha llegado incluso a sugerir que no le importaría una repetición de las elecciones si no se cambia el acuerdo entre PP y Ciudadanos para incorporar algunas medidas de su partido.
Desde la noche electoral VOX ha repetido que no será obstáculo para el cambio en Andalucía.Pero que tampoco será alfombra para la continuidad de las mismas políticas con otras siglas, sean las de PSOE-Podemos o las de PP-Cs. Hemos venido para cambiar de políticos y de políticas
— Santiago Abascal ?? (@Santi_ABASCAL) January 3, 2019
El órdago de Vox
El secretario general de Vox, Javier Ortega, aseguró este jueves que su formación no dará su apoyo a la investidura del PP en Andalucía si no se cambia la actual Ley de Violencia de Género. El acuerdo entre los de Moreno Bonilla y Ciudadanos incluye un punto en el que ambos partidos se comprometen a dotar del presupuesto necesario a la legislación vigente en esta materia, una medida que no comparten desde la formación ultraderechista.
“Nosotros vamos a solicitarle tanto a PP como a Ciudadanos, si tienen a bien sentarse a negociar, que todavía está por ver, que se sustituya esta ley de violencia de género por una en la que todos los recursos se destinen a la lucha contra todo tipo de violencia”, afirmó Ortega en el programa Espejo Público.
Sin consenso en el PP
Las posiciones en el PP respecto al hipotético pacto con Vox no son unánimes. La vicesecretaria de Estudios y Programas del Partido Popular, Andrea Levy, se ha mostrado dispuesta en Al Rojo Vivo a, manteniendo el pacto con Cs, "hablar sobre cuáles son esas mejoras y cuál es esa mayor protección que puede darse a la violencia doméstica, ya tenga que ver con mujeres u hombres".
"En el caso de la violencia o en el caso de las víctimas no miramos el sexo, miramos a quién se está perjudicando", ha dicho Levy, en un claro guiño al discurso de Vox, según el cual la actual Ley de Violencia de Género deja desprotegidos a los hombres.
Pese a ello, algunos dirigentes de la formación conservadora rechazan frontalmente cualquier concesión a Vox en materia de violencia de género.
Este viernes, el candidato del Partido Popular a la alcaldía de Pontevedra, Rafa Domínguez, ha sido tajante: "Ni yo ni nadie en sus cabales" pactaría con un partido como Vox a costa de renunciar a las políticas contra la violencia de género. "No podemos dar ni un paso atrás", asegura Domínguez.