El PP emplaza a Ciudadanos a definirse sobre qué hará tras las elecciones en Andalucía convocadas para el próximo 2 e diciembre. "¿Apoyará a Susana Díaz, como ha hecho hasta ahora? ¿Será cómplice de un régimen de cuarenta años de corrupción?", señalan desde Génova, y exigen a Albert Rivera que se pronuncie antes de que la gente vaya a las urnas.
Pablo Casado se va a volcar en las autonómicas andaluzas. Movilizará a todos sus equipos, desde la cúpula hasta los barones, para que participen activamente en una campaña que suponen el primer 'test' de su liderazgo. "Susana Díaz ha adelantado la convocatoria electoral por miedo, tiene pánico a la sentencia sobre los escándalos de los Eres (que saldrá en enero) y quiere distanciarse de un PSOE declinante", señaló Teo García Egea, número dos de la formación conservadora.
Los sondeos apuntan un posible 'sorpasso' desde Ciudadanos, el partido que propició la continuidad de Díaz al frente de la Junta. La formación que dirige Albert Rivera va a ser uno de los objetivos del PP en esta campaña. "No vamos a atacarles, basta con recordarle el papel de báculo que han hecho estos años y a exigirles que anuncien qué harán en el caso de otra victoria socialista", señalan en la dirección de Génova.
Abrir las ventanas
Casado ha aplazado la fecha de la Convención Nacional que pretendía celebrar los días 1 y 2 de diciembre. Será en enero para no coincidir con la cita andaluza. "Lo más importante ahora es el futuro de Andalucía, pienso volcarme en este desafío y todos vamos a apoyar a Juan Manuel Moreno para sacar al PSOE de las instituciones, en las que lleva cuatro décadas", asegura estos días el líder de los populares. "Es necesario llevar a cabo una gran transición, es necesario llevar a cabo una profunda renovación, abrir las ventanas y limpiar todos los escándalos que se han registrado durante tantos años".
"Cuarenta años". "Régimen". "Transición". En el PP se utilizan expresiones con remembranzas al franquismo para describir la situación política que se ha vivido y se sigue viviendo en Andalucía, donde nunca han podido gobernar. Javier Arenas se impuso en las elecciones de 2012, pero una coalición del PSOE e IU les arrebató el poder. Los estudios demoscópicos auguran un mal resultado para los populares. Su candidato, Moreno, no ha conseguido el tirón necesario para plantarle cara a la 'lideresa andaluza', quien confía de nuevo en conseguir el respaldo de Ciudadanos para gobernar.
"Podemos no le va a ayudar", reflexionan en el PP. Teresa Rodríguez se la tiene jurada. Díaz sólo podrá buscar el respaldo de Ciudadanos. Y ahí es donde "nos van a encontrar", porque Rivera tendrá que hacer frente en mayo a elecciones autonómicas y municipales yendo de la mano de un régimen de corrupción en Andalucía.
