El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha dicho que aunque "no sería buena noticia" que se celebrasen una nuevas elecciones en Cataluña, si "el separatismo" quiere otros comicios, su partido está "preparado para ello".
En declaraciones a la prensa en Buenos Aires, donde realiza una visita oficial, Rivera consideró que el "sentido común en el separatismo ha desaparecido".
"Las elecciones (del 21 de diciembre pasado) las hemos ganado nosotros y supongo que no quieren ir a otras elecciones", dijo el también diputado del Congreso español.
Agregó que "si quieren ir a otras elecciones pues no sería buena noticia por repetirlas, pero desde luego estamos preparados para ello".
Ciudadanos fue la fuerza más votada en las elecciones autonómicas catalanas del pasado 21 de diciembre, pero los partidos independentistas revalidaron en conjunto su mayoría absoluta en el Parlamento regional catalán.
En todo este tiempo, en el que no se ha avanzado en la formación de un nuevo Gobierno autonómico, el principal foco de conflicto se centra en la figura del candidato y expresidente catalán Carles Puigdemont, que huyó a Bruselas a finales de octubre y que ahora está en Berlín, después de ser detenido en Alemania y sobre quien pesa una orden de detención en España.
Rivera destacó que si finalmente las formaciones no constitucionalistas forman gobierno, "está claro que será un Gobierno que tendría que gestionar el fracaso del golpe a la democracia, del separatismo, que no tiene mayoría social, que no ha ganado las elecciones y tiene que inventarse candidatos cada cuarto de hora".
"Y en este caso mejor que sea un candidato que no esté imputado por la justicia", subrayó, a la vez que dijo estar convencido de que hay que exigir que los candidatos a presidir la autonomía "no estén imputados por malversación ni sedición ni prevaricación".
"Espero que se ponga en marcha el Gobierno, que tiene que ser un gobierno autonómico que gestione la autonomía de Cataluña dentro de la Constitución y el Estatuto de Autonomía. No puede ser un volver a empezar para volver a dar otro golpe", subrayó.
Consultado por el impacto que está teniendo la crisis catalana dentro de la escena internacional, señaló que "sin duda", que "intenten dar un golpe de estado en tu país en democracia, para separar un territorio del resto de España, tiene un impacto internacional".
"Creo que la gestión en la comunicación exterior es francamente mejorable, por decirlo suave. Hemos pecado de falta de comunicación. Se cerró la oficina de comunicación exterior del Gobierno antes de lo que sucedió en Cataluña", concluyó.