El presidente del Gobierno, su número dos, Soraya Sáenz de Santamaría, y el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, han interrumpido sus vacaciones y ya viajan al lugar del ataque para seguir el operativo de primera mano. En un primer momento, desde Génova se emitió un comunicado que decía: "Con motivo del atentado ocurrido en Barcelona, el presidente del Gobierno y del Partido Popular, Mariano Rajoy, suspende los actos previstos para mañana en Galicia". Ha sido poco después cuando Moncloa ha informado que el jefe del Ejecutivo estaba poniendo rumbo a Barcelona desde su descanso veraniego en Pontevedra (Galicia).
A través de la red social Twitter, Rajoy se refería así a los trágicos hechos: "En contacto con todas las administraciones. Prioridad: atender heridos en Las Ramblas y facilitar la labor de las Fuerzas de Seguridad".
Por otro lado, los grupos parlamentarios del Congreso de los Diputados han consensuado este jueves una declaración institucional en la que se condena el atentado, se rechaza "toda clase de violencia criminal" y se proclama que España "nunca dará su brazo a torcer" a quien pretenda imponer sus ideas por la fuerza.
"Ante los actos de barbarie ocurridos hoy en la ciudad de Barcelona, el Congreso de los Diputados quiere manifestar en nombre del conjunto de los españoles su más enérgico y sentido rechazo a toda clase de violencia criminal sea cual fuere su origen", señala la declaración .
Todos los grupos parlamentarios expresan su "firme solidaridad y cercanía con las víctimas y sus familias", al tiempo que condenan "con absoluta determinación a quienes han sido artífices de los asesinatos cometidos en una de las principales arterias de vida de la ciudad".
A su juicio, "el atentado contra quienes de forma inocente paseaban por las Ramblas barcelonesas lo es contra todos los españoles, contra las naciones europeas, algunas de las cuales han sufrido recientemente el duro mazazo de la violencia indiscriminada, y contra la libertad que todas ellas defienden como única forma de civilización".
"La sociedad española nunca dará su brazo a torcer contra la amenaza terrorista porque su fuerza nace de su unidad contra cualquier acción que mediante la violencia trate de imponer cualquier clase de ideas --subrayan--. Sin una sola fisura, los representantes de los ciudadanos defenderemos la vida y la libertad como valores fundamentales del presente y del futuro de la sociedad española", añade el texto.