“Se puede crear”, respondió Mariano Rajoy en Onda Cero sobre la figura del coordinador general del PP, ahora inexistente. “Es una figura que ya existió en el partido y puede haber una segunda vez… o no”. Dentro de la ambigüedad envuelta en un enigma que rodea la continuidad de Dolores Cospedal como ‘número dos’ del PP, Rajoy se ha permitido dar un paso más allá de lo que hasta ahora había ido. No ha descartado la posibilidad de que se desempolve la figura de coordinador general en la formación que en su día ya ocupó Ángel Acebes.
En el PP cobra cuerpo la posible continuidad de Cospedal en la cúspide de Génova. Seguiría ocupando el cargo de secretaria general, reforzada por este coordinador que actuaría como jefe de la sala de máquinas de la formación. Un funcionamiento prácticamente calcado al que ya existe ahora, dado que Fernando Martínez Maíllo, vicesecretario de Organización, se ocupa del día a día en el partido. Maíllo pasaría a ser nombrado coordinador, con plenas atribuciones ejecutivas en tanto que Cospedal continuaría en un papel meramente simbólico u ornamental.
Rajoy mantiene la incógnita. Este martes afirmó, en un foro periodístico, que anunciará lo que corresponda a los compromisarios en el marco del Congreso Nacional del partido. “Será una buena decisión, no le quepa duda”, señaló. En declaraciones al “Ideal” de Granada había asegurado días atrás que es posible compaginar las responsabilidades de ministro con las de alto cargo orgánico de una formación. “Ya ocurrió con José Blanco en el PSOE y con Francisco Álvarez Cascos en el PP y no creo que nadie ponga en duda su labor como secretarios generales”.
Dos posiciones enfrentadas
En el seno del PP hay un movimiento contrario a la continuidad de Cospedal al frente de la estructura, especialmente desde barones como Feijóo, Moreno o Herrera, que no han dudado en mostrarse poco partidarios de esta opción. En este bloque se subraya que Defensa es una cartera de Estado que no puede hacerse compatible con responsabilidades en el partido. Mencionan el caso del Yak 42, que “contaminó tangencialmente al PP” pese a tratarse de un asunto estrictamente del Ejecutivo.
Los defensores de la continuidad de Cospedal se apoyan precisamente en el dramático caso del avión estrellado en Turquía para subrayar la impecable actuación de Cospedal en el asunto, lo que evidencia que puede sacar adelante ambas responsabilidades. Veteranos conocedores de la intrincada sicología de Rajoy señalan que es complicada la continuidad de Cospedal. “A Sáenz de Santamaría le quitó la responsabilidad de Portavoz. Ya no aparece semanalmente ante los medios. Toca que a Cospedal también le alivie de algún un cargo. Para compensar. Y no va a ser el de Defensa, donde acaba de llegar”. La incógnita continúa pero Rajoy ha dado este jueves un paso en el territorio que hasta ahora no había penetrado: hablar del coordinador general.