El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha lanzado este martes una seria advertencia al jefe del Generalitat, Carles Puigdemont, a raíz de sus últimos movimientos. En concreto, le ha exigido que cese en sus amenazas a "periódicos y alcaldes por negarse a ponerse a sus órdenes", ha declarado en sesión de control en el Senado.
Así mismo, a pregunta del senador Josep Lluís Cleires (PDCat), Rajoy ha pedido a los convergentes que "hagan autocrítica si no quieren desaparecer". En su intervención, el jefe del Ejecutivo ha ido desgranando el retroceso de la antigua Convergéncia desde el año de 2010 y ha reprochado al partido de Puigdemont que, debido a su debilidad, actúe ahora en función de lo que le dicten los radicales de la CUP. "El señor Puigdemont me dijo que no podía negociar el referéndum, porque era innegociable", ha subrayado Rajoy para deshacerse de acusaciones de inmovilismo.
El presidente del Gobierno ha remarcado que él ha puesto todo su esfuerzo en "que no quebrara la Generalita, porque no podía cubrir su déficit". "Mientra unos gobernamos, otros se dedicaron a otras actividades. Usted están a las ordenes de los más extremistas y radicales en Cataluña", ha insistido.
"No echen la culpa a los demás. Han querido liquidar 500 años de historia. En la vida hay tener la responsabilidad y el coraje de asumir las consecuencias de sus propias decisiones, cosa que ustedes no han hecho nunca", ha recalcado Rajoy.
En este sentido, ha reprochado a Puigdemont y sus socios (ERC y la CUP) que "en unas horas han pretendido liquidar toda la legalidad, la Constitución, el Estatuto y la soberanía nacional". "Además, han atentado contra los derechos de todos, empezando por los diputados de Cataluña y ahora amenazan a los alcaldes que están en contra de su pronunciamiento", ha incidido el presidente del PP.
Por su parte, Cleries ha afirmado que "un millón de personas estábamos ayer llevando el centro de Barcelona, reclamando pacíficamente que queremos un nuevo Estado para Cataluña". Aquí, ha acusado al Ejecutivo de Rajoy de no respetar el Estatut de 2006 y de "romper el modelo de convivencia". "Nos quiere llevar a un modelo de sumisión. Usted vendió Cataluña por un puñado de votos. Gracias a usted y al PP tenemos un Estatuto que fue impuesto por el Tribunal Constitucional", ha declarado el portavoz del Grupo Nacionalista.