El eterno debate sobre la 'profesionalización' de la política regresa con la nueva legislatura, donde las bancadas del Congreso de los Diputados sufrirán una profunda renovación como la que supuso la llegada de Unidos Podemos y Ciudadanos en 2015.
Los partidos políticos tradicionales -PP y PSOE- han hecho una verdadera 'limpia' en sus listas. Pedro Sánchez y Pablo Casado diseñaron unas candidaturas para las elecciones generales del 28 de abril donde los rostros más conocidos de anteriores legislaturas han casi desparecido por completo para dar paso a fichajes mediáticos o sin ninguna experiencia política previa.
Joan Tardà, Carles Campuzano o Jordi Xuclà, los más veteranos de los grupos independentistas catalanes -ERC y PDeCAT- tampoco volverán a sentarse en los escaños de la carrera de San Jerónimo. Y en Podemos la purga de los críticos se une a las malas perspectivas electorales que podrían dejar un grupo parlamentario sin mucho que ver con el que llegó en 2016.
En su defecto, entrará con toda seguridad a la Cámara Baja Vox. El partido de Santiago Abascal ha reclutado para sus filas a diversos militares retirados de alto rango, a toreros, banderilleros o tertulianos del canal Intereconomía. Y los populares tampoco se quedan atrás en lo que ha fichajes mediáticos se refiere (Cayetana Álvarez de Toledo, Juan José Cortés, Adolfo Suárez Illana o Daniel Lacalle), así como Ciudadanos, con el expresidente de Coca-Cola Marcos de Quinto.
Así que en los pasillos de la Cámara Baja ya se murmura sobre lo que está por venir ante la posibilidad de que haya comisiones sin apenas veteranos con experiencia en los tira y afloja de las negociaciones legislativas o sin ningún tipo de preparación jurídica que complique mucho la actividad de los letrados de la Cámara. En definitiva, son ellos quienes guían a los diputados sobre lo que se puede o no se puede incluir en las normas.
"Cuando tenemos que negociar las enmiendas a puerta cerrada, hay que dejar a un lado la teatralización para lograr ponerse de acuerdo. Pero creo que en esta legislatura eso será cada vez más difícil", apunta un veterano diputado. Otros, en cambio, ven positivo que cada vez se incorporen perfiles más diversos y ajenos a la política que representen la pluralidad de la sociedad.