Soraya Sáenz de Santamaría trabaja a contrarreloj para conquistar a los compromisarios en aquellos lugares donde no ha sido la más votada. El mismo día en que la expresidenta de la Comunidad de Madrid Esperanza Aguirre se ha posicionado a favor de la candidatura de Pablo Casado para que sea él quien sustituya a Mariano Rajoy al frente del Partido Popular porque, según dice, no sabe cuál es la ideología de Sáenz de Santamaría, fuentes cercanas al equipo de la ganadora de la primera vuelta en las elecciones primarias han defendido que su candidata supera en apoyos a su contrincante de cara a la segunda vuelta.
Una vez hechos los primeros cálculos con respectos "la distribución de fuerzas", explican fuentes de la candidatura de Sáenz de Santamaría, la "sensación es tremendamente positiva y optimista" y la política vallisoletana vencería a Casado "con más que claridad", incluso en provincias donde ninguno de los dos ha ganado habría "una gran predisposición" a apoyarla. Su objetivo actual es "convencer" a los compromisarios de aquellas zonas donde la dirigente popular no ha salido victoriosa.
Soraya ha debatido con muchísima más gente y mucho más difícil que Casado. Su preocupación por ese posible debate es prácticamente cero"
"Cada compromisario va a votar lo que quiera. Muchos van a seguir el ritmo de lo que han votado los afiliados de su circunscripción, es lógico que haya esa influencia, pero en sitios donde las candidaturas que han pasado el corte de las primarias no han ganado, también influye que Soraya haya sido la lista más votada", relatan las mismas fuentes. "Personas relacionadas con Casado quieren que contemos con ellas cuando acabe el congreso", revelan.
En busca de una reunión con Cospedal
Por otro lado, aseguran que desde la candidatura de Soraya Sáenz de Santamaría están trabajando en la organización de reuniones con Pablo Casado y María Dolores de Cospedal. Aún no descartan una candidatura única. "Vemos posiciones alejadas pero eso no es incompatible", comentan. Sin embargo, reprochan a Casado "falta de experiencia política" en la forma de afrontar la segunda fase del proceso: "Se le olvida que somos compañeros de partido y que él forma parte del aparato del PP, esto no es una campaña entre formaciones distintas".
Y esa "falta de experiencia" es la que las mismas fuentes atribuyen a Casado en cuanto a los debates. "Casado anunció públicamente que quería un debate, Soraya ha debatido con muchísima más gente y mucho más difícil que Casado. La preocupación de ella ante ese posible debate es prácticamente cero", han apuntado. Sin embargo, más que por un debate, la candidatura de Soraya optaría por buscar un acuerdo y no confrontación. "Es mejor dialogar para construir, el debate depende de la Comisión Organizadora del Congreso, que tendrá lugar el 20 y 21 de julio", concluyen.