El escándalo de las supuestas finanzas irregulares del rey emérito Don Juan Carlos ha estallado en el peor momento político para la Casa Real: bajo gobierno de un PSOE históricamente "republicano", como recordó este lunes su secretario de Organización, José Luis Ábalos, al cual sostiene una fuerza abiertamente partidaria de acabar con la monarquía sin demora, Podemos.
En ausencia de Pablo Iglesias e Irene Montero, de baja maternal, el dirigente morado Rafael Mayoral avisó a Pedro Sánchez, mientras éste se encontraba reunido con toda la plana mayor de la Ejecutiva socialista en Ferraz, de que esta va a ser una bandera para su formación.
"Se acabó la ley de silencio con la monarquía", recalcó Mayoral. En privado, los dirigentes de Podemos no ocultan que este asunto les va a permitir sacar cabeza frente a un PSOE de 84 diputados que no quiso integrarles en el Gobierno y que ahora se ve abocado a mimar a su socio parlamentario... si no quiere perder votaciones en el Congreso y dar por acabada la legislatura.
No van a forzar a Sánchez a tomar decisiones precipitadas, dicen, "hay tiempo". Están optimistas respecto a la posibilidad de que la comisión salga adelante, incluso, con el voto a favor de Ciudadanos. Y eso llevó ayer al secretario de Organización, Pablo Echenique, a pedir "presión ciudadana y popular" para que al Ejecutivo no le quede más remedio que aceptar esa comisión de investigación; algo que ha enfadado bastante a la cúpula socialista.
El Gobierno ha intentado parar el golpe admitiendo la comparecencia del director del CNI a puerta cerrada; para Podemos no es suficiente y pide "luz y taquígrafos"
Consciente de ello, el Ejecutivo lleva 24 horas emitiendo señales de que no va a haber opacidad con las cintas grabadas por el comisario José Villarejo, las cuales reflejan horas de conversación a tumba abierta entre él, la amiga del rey Corinna zu Sayn-Wittgenestein y el expresidente de Telefónica Juan Villalonga, entre otros. La
De momento, intenta parar el golpe forzando la comparecencia del director general del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Félix Sanz Roldán, a puerta cerrada ante la Comisión de Secretos Oficiales. Ese es "el proceso normalizado e institucionalizado" y luego "ya veremos", dijo el ministro José Luis Ábalos. Algunas comisiones de investigación "han tardado bastante también y se han puesto en marcha después de determinados procesos de periodo de maduración política", insistió.
La novedad es que el Gobierno ya no descarta investigar al rey emérito por un supuesto cobro de comisiones ilegales por el AVE a la Meca y otras operaciones, y era el cerebro del caso Nóos por el que Iñaki Urdangarín está en la cárcel. Va a depender, lisa y llanamente, de la evolución de los acontecimientos.
Ábalos abrió la puerta tras la insistencia de Podemos en "luz y taquígrafos", no comparecencias a puerta cerrada del general Sanz Roldán, porque en las cintas se escucha claramente a Corinna zu Sayn-Wittgenstein, acompañante del monarca emérito en numerosos viajes oficiales, detallar cómo la utilizaba de testaferro para cobrar un dinero que era ingresado en cuentas opacas en Suiza.
El Gobierno ha establecido un 'cordón sanitario' en torno a Felipe VI, desvinculándole de las supuestas andanzas económicas de su padre durante 40 años de reinado
Los empresarios pagaban esas presuntas mordidas en una cuenta bancaria en el país helvético a nombre de Álvaro de Orleans-Borbón, primo segundo del monarca emérito; éste y Corinna son residentes en Mónaco.
Al margen de la derivada judicial del caso -el juez de la Audiencia Nacional Diego de Egea tiene que recibir todavía el informe pericial de la Policía sobre las cintas y archivar el caso o abrir diligencias previas-, el asunto es una bomba de relojería política y mediática contra Felipe VI y la Casa Real.
Cada diligencia judicial o revelación informativa será una dosis de recuerdo en la opinión pública, así que lo primero que ha hecho Pedro Sánchez es establecer un cordón sanitario para proteger al actual jefe del Estado de las supuestas andanzas económicas de su padre durante cuarenta años de reinado.