Sergio Sayas (Buñuel, 1979) es joven pero está acostumbrado a la política. Lleva más de una década en la vida pública, primero como líder de las juventudes de UPN y luego como parlamentario en Navarra y como concejal en Berriozar. Sus enfrentamientos con los nacionalistas vascos han sido tan habituales que ya forman parte de su ADN. Lo nuevo para él ocurrió el pasado fin de semana, durante el pleno de investidura de Pedro Sánchez, cuando se estrenó en la tribuna de oradores del Congreso de los Diputados.
El debutante de Navarra Suma (coalición que engloba a UPN, PP y Cs) cargó con rotundidad contra el presidente del Gobierno. Le afeó que no respondiera a la portavoz de Bildu que arremetió contra el Rey, le acusó de "arrodillarse" ante la izquierda abertzale y le espetó que tenía muchas "tragaderas" para ser investido con la abstención de los bildutarras.
El discurso arrancó los aplausos de la mitad de la Cámara, al igual que ocurriría dos días después con su compañero de UPN, Carlos García Adanero. Ambos van a esforzarse por ser "la voz de los navarros" en el Congreso y por combatir a Bildu y PNV. En su conversación con Vozpópuli, este filólogo de formación no se anda por las ramas y contesta con pocas palabras pero directas.
Mucho se ha hablado de su discurso durante la investidura. Fue muy duro contra Pedro Sánchez. Le acusó de tener muchas "tragaderas" para recibir el apoyo indirecto de Bildu y hasta de arrodillarse ante la izquierda abertzale. ¿No fue exagerado?
Para nada fui exagerado. Lo exagerado fue que se diera una respuesta que no estaba a la altura de lo que el discurso de Bildu suponía. El señor Sánchez tenía que haber dado una respuesta contundente. Era una ignominia para las víctimas del terrorismo y para cualquier demócrata de nuestro país.
¿Puede decirse que le gustó menos el discurso de Sánchez que el de Bildu?
Me gustó menos el discurso de Bildu, pero era mucho más esperado, porque a mí Bildu no me sorprende. Llevo muchos años conviviendo con ellos en las instituciones. Ya sé lo que dicen. Lo que no podía esperar era una respuesta tan sumisa por parte de presidente del Gobierno de España. Eso me desagradó especialmente.
¿Qué sintió al ver los aplausos de tantos diputados del PP, Vox o Ciudadanos? Es una imagen que no suele verse.
Se dieron muchas circunstancias: el discurso de Bildu, la respuesta inadecuada de presidente del Gobierno y, además, yo era el único que hablaba esa mañana entre todas las personas que podían decir algo que en ese momento sentía mucha gente en España. La reacción de los aplausos es fruto de que muchos españoles estaban pensando eso mismo.
Bildu no puede ser considerado un partido democrático más. En Bildu hay personas condenadas por formar parte de ETA. Y el PSOE lo está blanqueando
¿Hubo demasiada crispación en el debate o lo que pasó responde a la tensión que existe?
Vivimos un momento que nunca hemos vivido en nuestra historia democrática. Nunca alguien que ha aspirado a gobernar lo ha hecho con la abstención de un partido con personas condenadas por hacer declaraciones de independencia ilegales y con un partido que no se ha separado un milímetro de la organización terrorista ETA. Nunca antes alguien había planteado ser presidente con esas abstenciones que en realidad son apoyos.
Dice que Bildu no se ha separado de ETA, pero es estrictamente una coalición formada por varios partidos. Vox propone la ilegalización de Bildu. ¿Está de acuerdo?
La legalización o no de partidos políticos corresponde a la justicia, y no a los partidos. Soy muy respetuoso con la separación de poderes, porque es la base de cualquier democracia. No tengo opinión en ese tema. Eso sí, Bildu no puede ser considerado un partido democrático más. En Bildu hay personas condenadas por formar parte de ETA. Hace poco en Pamplona tuvo que dimitir una concejal porque reconoció ser de la banda terrorista. El señor Otegi, líder de Bildu, está condenado. No es un partido democrático más y el problema es que el PSOE lo está blanqueando.
¿Cómo va a ser el vínculo entre el PSOE y Bildu? ¿Cree que Bildu puede pasar a apoyar al Gobierno?
Si pasa lo mismo que en Navarra, sí. Porque en Navarra Bildu se está convirtiendo en socio prioritario del Partido Socialista. Le va a apoyar los presupuestos. Bildu está en la Mesa del Parlamento o en el Ayuntamiento de Huarte porque el PSOE ha querido. El Partido Socialista aprobó los presupuestos en Berriozar, donde el alcalde es de Bildu... Si Sánchez sigue el modelo de Chivite, sí, claro, pactarán.
Algunas víctimas de ETA han criticado a los partidos del centro derecha por arrogarse ser portavoces de todas ellas, ¿qué les diría usted?
Les digo que tienen todo el derecho de pensar como quieran. Me merecen todo el respeto comparta o no su opinión.
Bildu reclama al nuevo Gobierno que acerque a los presos de ETA a cárceles vascas y navarras. Y el PNV también está de acuerdo. ¿Qué opina usted? ¿Cree que el Gobierno los trasladará?
Creo que el Gobierno está demostrando una posición de extrema debilidad respecto a la izquierda abertzale que representa Bildu. Por el camino que veo a Sánchez, no me sorprendería que el Gobierno accediera a las pretensiones históricas de la izquierda abertzale.
Somos la voz de la mayoría de ciudadanos navarros, que creen en el Amejoramiento del Fuero, en la lealtad a España y en la solidaridad con el resto de comunidades
Navarra Suma es la coalición más votada en Navarra, pero tienen dos diputados. Bildu, en cambio, tiene grupo propio en el Congreso gracias a sus cinco diputados obtenidos por País Vasco y Navarra. ¿Qué piensan hacer ustedes frente a las reclamaciones de Bildu sobre la comunidad foral?
Usaremos nuestra voz para defender la Navarra que apoya la gran mayoría de ciudadanos navarros. Bildu no es la fuerza más votada en Navarra, ni mucho menos. Representa a una parte de la ciudadanía, eso es innegable, pero nosotros tenemos el doble de escaños que Bildu por Navarra. Somos la voz de la mayoría de ciudadanos navarros, que creen en el Amejoramiento del Fuero, en la lealtad a España y en la solidaridad con el resto de comunidades.
Decía usted antes que Sánchez imita en el Congreso lo mismo que María Chivite hizo en Navarra.
Lo que vimos en Navarra en agosto fue el ensayo general de lo que Sánchez ha hecho para toda España en el Congreso. Es exactamente el mismo patrón: decirle a los ciudadanos que no se va a apoyar en los nacionalistas y luego hacer justo lo contrario. La única diferencia es que Sánchez ganó las elecciones y Chivite no.
¿Eso penalizará al PSOE?
Por supuesto que penaliza al PSOE, pero penaliza también a las instituciones. Es lo que pasa ahora mismo con el Gobierno de España, que tiene un presidente al que nadie cree, lo que supone un desprestigio para la propia institución.
¿Qué le parece que Sánchez pactase con el PNV retirar las competencias de Tráfico a la Guardia Civil en Navarra?
Una injerencia en nuestra comunidad, una falta de respeto a la voluntad de los navarros, que no han elegido el PNV para representarlo y un insulto a la propia comunidad. El problema no está en la competencia, sino en con quién se pacta y para qué. Y el PNV no pacta la competencia para que Navarra tenga más autogobierno, sino para expulsar a la Guardia Civil.
Desde el PSOE les acusan de haber defendido lo contrario, de que UPN pedía la trasferencia de esa competencia.
Seguimos pensando que el problema no es la competencia. No hemos cambiado el discurso. Pongo un ejemplo para que se entienda: Navarra tiene la competencia del transporte pesado en carretera; es una competencia exclusiva de la comunidad, pero la prestación del servicio es compartida entre la Policía Foral y la Guardia Civil. Una cosa es la titularidad de la competencia y otra es la prestación del servicio. La petición del PNV esconde que busca que la Guardia Civil deje de prestar el servicio y, por tanto, deje de ser necesaria en nuestra comunidad.
Los socios de Chivite quieren que la ikurriña pueda ondear en Navarra y las cadenas de Navarra puedan estar en el escudo de Euskadi. ¿Qué le parece?
Hemos defendido siempre en todas las instituciones que Navarra tiene unos símbolos claros: nuestra bandera y nuestro escudo. No nos representa otra bandera, excepto, por supuesto, las de España y Europa. No pueden ponerse en las instituciones otras banderas. ¿Por qué se quiere poner la de la Comunidad Autónoma Vasca pero no otras como las de Aragón o La Rioja, que son próximas a nuestra comunidad? Detrás de ese debate sobre la ikurriña hay una visión nacionalista de Navarra que la gran mayoría de los navarros no comparte. El 80% se consideran navarros y españoles, pero no vascos.
Ya nadie sabe lo que defiende Sánchez. No es de fiar y, por ello, es absolutamente imprevisible saber qué puede pasar. Nadie puede prever qué posición política va a tener
En el borrador de reforma del Estatuto vasco se hacen unas cuantas referencias a Navarra. Una de ellas es que, como ya recoge el Estatuto de Gernika, la comunidad pueda unirse al País Vasco. ¿Qué le parece la respuesta del Gobierno de Chivite a estas pretensiones?
Me parece una respuesta acomplejada, porque el PSOE navarro antepone la relación con sus socios y que no se deteriore su Gobierno a la defensa de Navarra. La actitud del Gobierno de Navarra tendría que haber sido beligerante ante una injerencia clamorosa por parte del Parlamento vasco.
¿Urkullu se va a salir con la suya aprobando un nuevo Estatuto con el apoyo de PSOE y Podemos?
Desgraciadamente estoy convencido de que sí. Viendo la actitud que tienen el señor Sánchez y todo el PSOE en las cortes generales, el señor Urkullu podrá sacar adelante lo que le venga en gana.
Lo que por ahora distancia al PNV de sus socios es el derecho a decidir. ¿Cree que llegarán a un acuerdo?
Es que ya nadie sabe lo que defiende Sánchez. No es de fiar y, por ello, es absolutamente imprevisible saber qué puede pasar. Nadie puede prever qué posición política va a tener Sánchez.
¿Qué futuro le ve al Gobierno de Navarra, que es una alianza de Chivite con nacionalistas y Podemos, depende de la abstención de Bildu y al mismo tiempo a veces vota junto a ustedes?
Soy malo haciendo pronósticos. Pero lo que tengo claro es que el Partido Socialista está dispuesto a ceder cualquier cosa a Bildu a cambio de mantenerse en el sillón. Y estamos viendo que ese "cualquier cosa" es exactamente cualquier cosa.
Vox está muy alejado de las posiciones de los partidos que componen Navarra Suma
Ahora mismo el PSN se ha aliado con el nacionalismo frente a lo que ha ocurrido históricamente. ¿Habrá pactos de socialistas y Navarra Suma en el futuro?
Nosotros vamos a seguir defendiendo ante los ciudadanos navarros un proyecto de progreso. Cuando hemos gobernado con el PSOE, Navarra ha sido un ejemplo de liderazgo para el resto de España. Y vamos a seguir defendiendo la realidad de nuestra comunidad: una comunidad foral, diferenciada, pero que forma parte del proyecto común de España. Estamos empezando a ser los únicos que defienden eso, porque los pactos con los nacionalistas ponen en riesgo la posición socialista.
Para acabar, ¿Vox entrará en Navarra Suma?
Vox está muy alejado de las posiciones de los partidos que componen Navarra Suma. Para empezar, Vox defiende la supresión de las comunidades autónomas y UPN es un partido foralista y no solo autonómico.