Al PP empiezan a no salirle los números para un gobierno en solitario en Castilla y León. El partido arranca la campaña con peores expectativas electorales que hace poco más de un mes, cuando Mañueco anunció la disolución de las Cortes y la convocatoria anticipada de los comicios. El estancamiento en los sondeos, tanto propios como ajenos, se achaca a la falta de movilización del electorado, especialmente el rural y, por ese motivo, los populares harán un esfuerzo extra en los pequeños municipios.
"Cuando se anunciaron las elecciones, estábamos en 37 o 38 escaños, pero ahora, en el mejor de los escenarios, nos están dando 36". Así de claro se muestra un alto cargo del PP de Castilla y León, consultado por Vozpópuli, sobre la evolución demoscópica del partido en la región desde el pasado mes de diciembre.
La misma fuente confirma que "el objetivo es sacar más escaños que toda la suma de la izquierda, por lo que podría valernos con 35 o 36, pero ese resultado no está claro ahora mismo". Los populares, además, necesitarían el respaldo de Vox para blindar la mayoría absoluta, y "si más de la mitad de sus procuradores son imprescindibles para garantizar 41 'síes', van a exigir entrar en el Gobierno".
Abstención en los pueblos
Ese escenario, admiten diversas fuentes del PP, tanto a nivel nacional como autonómico, es el que ni Casado ni Mañueco quieren ver ni en pintura. Y, por ese motivo, la dirección regional del partido está pidiendo a alcaldes y cargos locales que se movilicen donde el partido prevé menos activación del voto: en los pueblos y en los pequeños y medianos municipios.
Desde el PP admiten que "según lo que estamos viendo, celebrar unas autonómicas sin hacerlas coincidir con las municipales nos penaliza a nosotros y al PSOE". Los grandes partidos, con presencia en esas pequeñas agrupaciones electorales, "siempre nos beneficiamos en las municipales porque el votante coge la papeleta del alcalde y la de las mismas siglas para la comunidad".
Ahora, sin embargo, esa circunstancia no se va a dar, lo que "iguala las cosas" con Vox y las candidaturas de La España Vaciada, que empiezan a dejar de ser consideradas como un 'bluf' por los populares: "El factor de la novedad juega a su favor y a nuestro electorado le está costando entender por qué se convocan estas elecciones".
En los pueblos conocen a nuestros alcaldes y cargos locales. Por eso, les estamos pidiendo que se impliquen en la campaña como si de unas elecciones municipales se tratara. Esa es la clave
El partido, en todo caso, quiere aprovechar su fuerza territorial para recabar el mayor número posible de votos en las pequeñas poblaciones: "En los pueblos conocen a nuestros alcaldes y cargos locales. Por eso, les estamos pidiendo que se impliquen en la campaña como si de unas elecciones municipales se tratara. Esa es la clave".
Actos 'de proximidad' de Mañueco
Más allá de la activación de los alcaldes y los cargos locales, el comité organizador de la campaña electoral ha diseñado un calendario para Alfonso Fernández Mañueco en el que el actual presidente y candidato tenga reservado, cada día, un acto 'de proximidad' en pequeñas localidades y pueblos, más allá de los grandes mítines en capitales de provincia.
Así, Mañueco visitará, en las próximas dos semanas, municipios como Aguilar de Campoo, Burgo de Osma, Medina del Campo, Peñaranda de Bracamonte, Arévalo, Aranda de Duero, Ciudad Rodrigo y Toro.
Con esta agenda del presidente, y la implicación de alcaldes y cargos locales, el PP espera movilizar al electorado abstencionista y asegurarse un colchón suficiente para garantizar un mínimo de 36 procuradores: "Si llegamos a esa cifra, el gobierno en solitario estará más cerca".
