Pedro Sánchez ha logrado este jueves su objetivo: rebajar la malversación y reformar la ley para garantizarse una nueva mayoría en el Tribunal Constitucional. La votación se ha producido en el Congreso después de que el TC aparcara hasta el lunes la decisión sobre la legalidad de esas iniciativas, pero el PP no ha querido participar de la misma. Para los populares, el de hoy es "el pleno más negro en los últimos 40 años desde la Transición".
Así lo califican fuentes de la dirección nacional de los populares, que acusan al Gobierno, y a la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, de haber permitido la "tramitación parlamentaria menos digna" desde la vuelta a la democracia a España. El PP, que pidió que el pleno no se celebrara después de que el TC no resolviera hoy su recurso de amparo, considera que "se ha hecho un daño sin precedentes al poder legislativo y al propio Estado".
En ese sentido, los populares califican la jornada de este jueves como una "jornada negra sin precedentes" en la que "hemos visto al Gobierno desafiando al Estado, y utilizando al poder legislativo para hacer un atentado contra el poder judicial".
Hemos visto al Gobierno desafiando al Estado, y utilizando al poder legislativo para hacer un atentado contra el poder judicial
Las mismas fuentes destacan a Vozpópuli que "hoy se han votado en el Congreso leyes cuya legalidad está en cuestión por el TC": Una circunstancia que supone "un ataque contra el Estado de Derecho y la Constitución Española".
Como el Parlament en 2017
Diputados del PP han comparado este pleno con los celebrados en septiembre de 2017 en Cataluña para aprobar las leyes que desembocaron en el referéndum ilegal. Un paralelismo que ya había señalado en la tribuna la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas.
Altos cargos populares destacan, en todo caso, que "ahora es el Gobierno de España el que ataca al propio Estado" y continúa con la tramitación de unas iniciativas que pueden ser declaradas ilegales por el Tribunal Constitucional.
Por ese motivo, precisamente, el PP decidió no participar en la votación: "No podíamos blanquear este procedimiento". Una decisión que, de hecho, ya tomaron los populares en el Parlament en 2017, junto al PSC y Ciudadanos. Hoy, los naranjas, también se negaron a votar.
Vox, por su parte, abandonó el pleno cuando Batet decidió continuar con la tramitación, aunque sus diputados sí votaron en contra de la rebaja de la malversación y la rebaja de las mayorías para elegir nuevos magistrados al Tribunal Constitucional.
Indignación con la referencia al 23-F
En el PP, además, acusan al Gobierno de haber comparado al partido y a los jueces con los golpistas del 23-F, después de que el socialista Felipe Sicilia afirmara que los populares han usado al TC para impedir la renovación del Constitucional que estipula la Ley de leyes: "Quisieron parar la democracia con tricornios y hoy han querido hacerlo con togas, pero no lo han conseguido porque nuestra democracia es fuerte y sólida".
El parlamentario del PSOE señaló, además, que el PP buscaba un golpe para "parar la democracia", como en 1936, y en 1981.
El discurso de Sicilia hzio saltar de su escaño a Gamarra, que pidió la palabra para censurar las palabras del diputado socialista y recordar que el 23-F, quien ocupaba la bancada del Gobierno era el centro derecha.
Sin_Perdon
Por eso se oponen con toda firmeza a promover una MOCIÓN DE CENSURA. Este PP no da pena, da vergüenza.
Messidor
Ojalá tenga la oportunidad de hacerlo y arrastrar a esa basura por el barro antes de irse él mismo al infierno.