El lehendakari, Imanol Pradales, ha reafirmado su apuesta por un "pacto político" que incluya "el reconocimiento de Euskadi como nación" y ha advertido, en referencia a los acuerdos sobre transferencias estatuarias alcanzados entre los gobiernos central y vasco, que "el pacto obliga y Moncloa lo sabe".
Pradales ha lanzado este mensaje en el 'Alderdi Eguna', el día del partido del PNV, en el que ha iniciado su intervención subrayando la importancia de "honrar" a quienes "lucharon por nuestro pueblo y lo dieron todo; sacrificando todo por y para Euskadi".
En especial, se ha referido a su predecesor como lehendakari, Iñigo Urkullu, del que ha subrayado que es "el último eslabón de una cadena que nos une y vertebra".
El actual lehendakari ha destacado que en sus doce años al frente del Gobierno Vasco, Urkullu ha demostrado un "compromiso inquebrantable" y ha realizado "un trabajo incuestionable" para "defender la causa del Pueblo Vasco". "Has dejado una Euskadi mucho mejor de la que encontraste; no se me ocurre mayor y mejor legado", ha añadido.
En materia de autogobierno, ha recordado que el Estatuto de Autonomía de Guernica fue aprobado hace más de 44 años, pese a lo cual "sigue incumplido". Por ese motivo, ha advertido de que "ya no son suficientes ni las buenas palabras ni las buenas intenciones".
Pradales, en referencia a los acuerdos entre los gobiernos vasco y central para el traspaso de competencias estatutarias, ha recordado que "las competencias y el calendario están claros", por lo que "el Gobierno español tiene que pasar de las palabras a los hechos; tiene que cumplir". "El pacto obliga y Moncloa lo sabe", ha avisado.
El lehendakari ha manifestado que el País Vasco necesita "un pacto político que dé respuesta a los nuevos tiempos y a las nuevas necesidades de la sociedad vasca".
En esta línea, ha señalado que se debe "renovar el 'hardware' del autogobierno" a través de un pacto "que mejore y ensanche nuestras capacidades políticas" y que permita "asentar una relación bilateral con el Estado que incluya el reconocimiento de Euskadi como nación, la singularidad de nuestro autogobierno y un sistema de garantías para el cumplimiento efectivo de lo acordado".
A su vez, y continuando con la metáfora informática, ha considerado que el País Vasco requiere de cambios en el "software", en "aquello que no es físico, que no se ve, pero es clave para que un país avance", como "el fortalecimiento de nuestra comunidad".
En este ámbito, ha anunciado que el Ejecutivo estudiará "nuevas vías que superen los marcos estatales para el crecimiento de nuestro pueblo" y que lleven a "una nueva Euskadi global, más libre y conectada al mundo".
"Vienen tiempos importantes para avanzar hacia un nuevo futuro político para Euskadi. El derecho histórico nos asiste; la voluntad democrática y mayoritaria del pueblo vasco es y será decisiva; la voluntad democrática y mayoritaria del pueblo vasco es y será y decisiva y determinante", ha anunciado.
Este es un proceso en el que —según ha dicho— se ha de actuar "sin miedo a cometer errores; tomando decisiones valientes; y con acción de gobierno y acción política". "Doble responsabilidad, doble compromiso. Nuestra acción de gobierno debe contribuir a fortalecer y ensanchar nuestro proyecto político; por eso necesitamos vuestra fuerza, compromiso y ayuda", ha manifestado, dirigiéndose a los afiliados y simpatizantes 'jeltzales'.
"Autoexigencia" para "mejorar"
En este sentido, ha indicado que transformar la sociedad vasca "significa estar presentes, participar y trabajar desde la máxima humildad y abiertos a la crítica", con el fin de "mejorar" y a partir de la "autoexigencia".
Pradales, al igual que viene haciendo en reiteradas ocasiones desde el inicio de su mandato, ha advertido sobre "la amenaza del desprestigio de la política y de la acción institucional" por parte de quienes explotan "el populismo y la demagogia".
En este sentido, ha expresado su rechazo a los "discursos de soluciones fáciles a problemas complejos", frente a los que ha reivindicado a quienes defienden "la ejemplaridad en el comportamiento político y la responsabilidad institucional". "Nuestro valor es decir la verdad; afrontar los problemas de frente ; sin falsas promesas", ha destacado.
También ha alertado de la "amenaza latente" que constituye "la tendencia jacobina y centralista de los estados". Pradales ha reafirmado su compromiso con la defensa del "autogobierno singular", los Derechos Históricos y la "bilateralidad" en la relación entre el País Vasco y el Estado.
En la misma línea, ha reivindicado al País Vasco "como sujeto político", y ha denunciado que en las últimas semanas se han reproducido los "ataques" al Concierto Económico vasco y al Convenio navarro. "No es algo nuevo, pero es preocupante", ha alertado, motivo por el cual ha llamado a defender "juntos" estas normas —que regulan las relaciones económicas y financieras entre Euskadi y Navarra y el Estado— "desde las instituciones, los partidos políticos, los agentes sociales y económicos, y la sociedad en su conjunto".
Un modelo que "funciona"
El lehendakari ha reivindicado, asimismo, el "modelo" del PNV, del que ha destacado que "funciona" y que consiste en "la construcción nacional y social de Euskadi piedra a piedra; día a día". Todo ello —ha añadido— "sabiendo leer el momento, junto con la sociedad vasca, con paciencia e inteligencia política, sin perder nunca el rumbo".
"Hay quienes defienden otro modelo; el modelo populista del 'todo es posible', del 'tenemos derecho a todo' aquí y ahora", ha criticado. Este último —ha añadido— es un modo de hacer política que trata a los ciudadanos "de manera infantil", puesto que "intenta vender soluciones mágicas que son imposibles y que hipotecan nuestro futuro".
En este sentido, ha advertido de que este último modelo "se miraba en el espejo de la Cuba castrista y la Nicaragua sandinista; y hoy jalea la Venezuela chavista". Frente a quienes defienden estas posiciones políticas, ha destacado que el PNV "siempre ha defendido otros referentes y valores", dado que su "espejo" es el de "las democracias más avanzadas del norte de Europa".
Pradales ha apelado al "orgullo" que supone formar parte del PNV, de su "pasado" y de sus "valores", así como de "lo que hemos construido y, sobre todo, de lo que vamos a ser capaces de lograr a futuro".
El lehendakari ha precisado que los retos que afronta el País Vasco giran en torno a cuestiones como "el sentido de comunidad, la ejemplaridad, el compromiso cultural y con el euskera, y el autogobierno", y que estos desafíos "son una oportunidad".
"Tenemos un proyecto de futuro para Euskadi; un proyecto alineado con Europa que responde a la triple transformación digital, verde y social", ha explicado.