El PSOE ha logrado alquilar, con derecho a compra, la que fue sede del Partido Socialista de Madrid/PSOE, en la calle Miguel Fleta, un edificio que está situado en un polígono industrial urbano. La operación fue realizada por la anterior ejecutiva socialista dirigida por Alfredo Pérez Rubalcaba y supone un alivio para la situación económica de las arcas socialistas. Los nuevos dirigentes han recibido completa información sobre el tema. En las últimas semanas se está procediendo a realizar algunas reformas en el edificio.
Entre estas obras está la reparación de las bajantes pues el olor a cloaca en el salón de actos, producido por una mala construcción de alguna arqueta, hacía irrespirable la sala. “Lo estamos dejando como nuevo y se han acabado los olores”, dijo a vozpopuli.com uno de los empleados trabaja en el edificio.
La operación la ha realizado el PSOE nacional, como todas las inmobiliarias, ya que los locales, excepto los del PSC, son propiedad de Ferraz y se opera siempre con un solo CIF, aunque luego se llegue a acuerdos con los partidos regionales. En el caso de este local los socialistas venían pagando la hipoteca, por lo que su alquiler vendrá muy bien para poder seguir abonando la cuota. Esta operación se enmarca dentro del plan del PSOE de reordenación de inmuebles en el que está incluido también el histórico edifico de Gobelas.
En un principio se pensó en utilizar el edificio de Miguel Fleta para sede de las diferentes fundaciones del partido, pero finalmente quedó incluido dentro del plan de reordenación. Muchos socialistas calificaron la compra de este edificio como un grave error de la época de Rafael Simancas. El partido tenía un edificio histórico en la calle Santa Engracia, que había sido sede central socialista tras la muerte de Franco. Cuando el Federal se mudó a la calle Ferraz ese edificio quedó para la entonces FSM/PSOE.
En tiempos de Rafael Simancas una inmobiliaria compró por unos 3,6 millones de pesetas el edificio para hacer pisos. Entonces los socialistas madrileños se mudaron a Miguel Fleta, en un polígono industrial. Se pagó por el edificio 1,8 millones de euros. Simancas dijo que era un edificio inteligente con los mejores recursos tecnológicos. La realidad fue que estaba mal comunicado, con el metro lejos, con dificultades para encontrar aparcamiento en la calle y público y no tan grande como se dijo.
Para colmo la mala construcción de los desagües hacía irrespirable el ambiente en la sala de reuniones del sótano. Una rueda de prensa en el salón de actos, lleno de columnas y no construido para ese fin, era una tortura respiratoria.
Al centro de Madrid
Con Tomás Gómez al mando el PSOE de Madrid buscó una sede más céntrica, “más cercana a los ciudadanos” y con mejores comunicaciones. Tomás Gómez llegó a decir que quería ver desde el local el despacho que iba a ocupar en la Puerta del Sol.
Y encontró un buen local. Alquiló a la Asociación de la Prensa de Madrid unas oficinas en la Plaza Callao y llegó a colgar carteles electorales que el Ayuntamiento le hizo retirar.
