La tramitación de la Ley Orgánica de Modificación de la Loe (Lomloe), conocida popularmente como 'Ley Celaá', continúa su senda en el Congresos de los Diputados. Ni la pandemia ni la falta de consenso ha servido para frenar los planes del Gobierno para derogar la vigente Lomce y reformar el sistema educativo.
Según ha podido saber Vozpópuli, PSOE y Podemos -partidos que conforman la coalición y que ostentan la mayoría en la Mesa- pretenden liquidar las 1.168 enmiendas que se han presentado para modificar la norma en tan solo cinco sesiones.
Tampoco están dispuestos a que la Cámara Baja acoja nuevas comparecencias de la comunidad educativa sobre la reforma y esta se vea ralentizada. Así lo constataron sus votos en contra durante la Comisión de Educación que tuvo lugar en la noche del miércoles tras el Pleno.
PSOE y Podemos 'estrujan' el calendario
Después de una docena de prórrogas, la Mesa cerró el plazo para presentar enmiendas parciales el pasado 23 de septiembre. Los distintos puntos de la ley y todas las modificaciones propuestas por los grupos serán analizas en la Ponencia.
Se trata de un grupo de trabajo que se encargará de votar las iniciativas y de presentar un dictamen a la Comisión de Educación. Participan los distintos representantes de los grupos parlamentarios y, en este caso, suelen ser los portavoces de Educación. Las deliberaciones son a puerta cerrada.
De acuerdo al plan de trabajo que manejan los diputados, la idea de PSOE y Podemos es que la norma esté aprobada en el Congreso y pase al Senado a lo largo de este curso y pueda entrar en vigor a partir de 2021/2022.
Para ello, las fuerzas que forman la coalición de Gobierno han estrujado el calendario de tal forma que la Ponencia tendrá que analizar una media de 233 enmiendas por cada una de las cinco sesiones. En caso de que se fijen dos sesiones por semana, los representantes de cada grupo se verán obligados a analizar más de 400 propuestas a la semana.
Tiempos de intervención de 12 minutos
Cada grupo contará con un tiempo máximo de 12 minutos de intervención en cada sesión de cuatro puntos y de 15 minutos de intervención en cada sesión de cinco puntos que se distribuirán según su propio criterio a lo largo de la reunión.
Al finalizar cada encuentro se votarán las enmiendas de los puntos del orden del día debatidos. Excepcionalmente, sí se podrán dejar para la siguiente sesión las enmiendas transaccionales que se estén negociando entre los grupos.
Una vez que las 1.168 enmiendas sean analizadas en la Ponencia, esta emitirá su dictamen a la Comisión de Educación, que debatirá la norma y las propuestas de modificación en público. Después se procederá a la deliberación del proyecto en el Pleno. De aprobarse, el texto iría al Senado para después volver al Congreso y aprobarse definitivamente como ley.
La oposición tacha la maniobra de "atropello"
La celeridad con la que se está tramitando el proyecto en plena pandemia ha despertado las críticas de la comunidad educativa y de los partidos de la oposición. Tachan la maniobra de "atropello".
La 'popular' Sandra Moneo acusó al Gobierno de "irresponsable" y de "falta de empatía con la comunidad educativa". Desde Ciudadanos, Marta Martín señaló que "la ministra Celaá ha dicho que no tenía autoridad para tramitar la vuelta al cole, pero sí tiene autoritarismo para tramitar una ley sectaria con procedimientos de dudosa calidad democrática".
A última hora de este miércoles, la Comisión de Educación y Formación Profesional del Congreso rechazó, por 20 votos en contra del PSOE y Unidas Podemos, que la comunidad educativa participase en la tramitación, a través de comparecencias, del proyecto. La celebración de comparecencias sí fue apoyada por PP, Vox y Cs, que son los partidos que las habían solicitado.