España

Golpe al bipartidismo: PSOE y PP empatan tras perder 900.000 votos

Nueva crisis en el bipartidismo, según la encuesta de IMOP-Insights para El Confidencial, basada en 1.315 entrevistas realizadas entre el 20 y el 30 de diciembre. Los dos grandes partidos

  • El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente del PP, Pablo Casado. -

Nueva crisis en el bipartidismo, según la encuesta de IMOP-Insights para El Confidencial, basada en 1.315 entrevistas realizadas entre el 20 y el 30 de diciembre. Los dos grandes partidos están en su peor momento y desde el observatorio electoral del pasado 24 de noviembre ya han perdido cerca de 900.000 votos y 16 escaños en conjunto. De celebrarse hoy las elecciones generales, PSOE y PP quedarían empatados con 102 diputados y una diferencia mínima de votos, con el 25,2% y el 25%, respectivamente. Así, una investidura sería aún más complicada que en 2019.

Esta debilidad de socialistas y 'populares' coincide con un horizonte de esperanza para los principales movimientos y novedades en la izquierda. El efecto Yolanda Díaz se nota en el avance de Podemos. Aunque no llega al 12,9% de los votos logrados en los comicios de 2019, el partido morado se recupera al pasar del 10,6% del pasado mes de septiembre al 12,1% actual, lo que se traduciría en 30 escaños, cinco menos de los que tiene en el Congreso de los Diputados. Su buen momento se debe a varias cuestiones. La primera, al retroceso prolongado de Pedro Sánchez, que en un mes y medio se ha dejado por el camino un 1,9% de los apoyos, lo que equivale 460.000 votos. Por su parte, Yolanda Díaz ha rescatado 364.000. Además, la ministra de Trabajo ha conquistado el electorado de Más País por la pérdida de peso de Íñigo Errejón. Pero especialmente obedece a un aumento de la fidelidad de sus votantes potenciales. Si en septiembre solo pensaba en repetir el 63,5%, ahora lo hará el 69,6%.

Partidos nacionalistas

Los partidos nacionalistas más radicales confirman la ascensión de las últimas semanas y en total sumarían ya 13 escaños: cinco de Bildu, cuatro de la CUP y otros cuatro del BNG. Esto refleja un crecimiento exponencial de los apoyos en sus respectivas comunidades autónomas y advierte de un salto notable en el número de representantes en la Cámara Baja. Bildu pasaría en el País Vasco del 18,7% que obtuvo en las generales de 2019 a un 21,2%; mientras que en Navarra crecería del 16,9 al 19,7% actual, 40.000 votos más. La misma situación experimentan la CUP y el BNG, en ambos casos aumentando incluso sus diputados. Los catalanes crecerían casi tres puntos, del 6,4% de 2019 al 9%, con 100.000 apoyos más en Cataluña, pasando de dos a cuatro escaños a nivel nacional. Los independentistas gallegos, por su parte, ganarían 143.000 votos en su región, lo que se traduciría en un salto considerable, del 8,1 al 18%, pasando de uno a cuatro asientos en el Congreso.

Según el escenario que plantea la encuesta del citado medio, Sánchez solo tendría una mayoría de 163 diputados y necesitaría obligatoriamente el apoyo de los siete escaños de Junts per Catalunya y de los ocho que suman la CUP y el BNG (o de la abstención de uno de ellos).

Derecha

La derecha, aunque tampoco alcanza la mayoría absoluta, sí amplía progresivamente su ventaja y del empate que hubo en las elecciones de 2019 se ha pasado a una diferencia de más de siete puntos, con un 46,4% de los votos frente al 39,2% de la izquierda.

Pablo Casado seguiría como el líder del frente liberal-conservador, pero muy lejos del punto máximo que alcanzó en el sondeo del 27 de octubre, cuando llegó al 28% de los votantes y los 120 diputados. Lastrado por el desgaste de su lucha interna con Isabel Díaz Ayuso, en este momento solo alcanzaría los 172 diputados de la suma de PP, Vox, Ciudadanos y Navarra Suma, pero con la preocupación de que su ventaja respecto a Santiago Abascal ya no es tan holgada ni evidente como hace solo unos meses.

Vox se ha estabilizado y, aunque ha perdido un asiento respecto a la encuesta de hace 15 días, los márgenes siguen siendo pequeños, con variaciones por debajo del 1% y la certeza de que la tendencia de después del verano se ha invertido en favor de los de Abascal. Los populares llegaron a acaparar el 60% de los votantes de la derecha, pero ahora están en el 54%, con Vox en el 40%.

Mientras tanto, la única preocupación de Ciudadanos es salvar el honor en plena descomposición. Pese a su pésima situación, el enfermo da algunos síntomas de recuperación y ya está en el 2,8% de los votos, frente al 2,2% del pasado 24 de noviembre. Lograría un escaño por Madrid.

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