El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha pedido este viernes a los alcaldes y concejales de Cataluña, en especial a los de su partido (PDeCAT), que estén "activos, movilizados y comprometidos" para colaborar con la celebración del referéndum de independencia de otoño.
Lo ha dicho en la convención municipalista del PDeCAT, el mismo día en que ha anunciado la fecha y la pregunta del referéndum de independencia: el domingo 1 de octubre con el enunciado '¿Queréis que Cataluña sea un Estado independiente en forma de república?'.
Ha asegurado que Cataluña se encuentra ante un escenario único para convertirse en Estado, y ha invitado a los alcaldes y a los concejales a no desaprovecharlo, asegurando que él no se echará atrás: "Ahora es la oportunidad. Ahora".
Puigdemont reivindica el papel de los ayuntamientos en el proceso soberanista, ya que su función se intuye clave para el día del referéndum, cuando la Generalitat necesitará puntos de votación frente al rechazo del Gobierno central.
"Hombres y mujeres del mundo local: el Govern de Cataluña cuenta de manera insobornable con vosotros para sacar adelante el mejor derecho de una democracia que es votar", ha solemnizado ante los asistentes, que le han recibido en pie y al grito de 'Independencia' y de 'Presidente'.
Además, ha reivindicado el papel que está desarrollando el PDeCAT en los ayuntamientos de Cataluña y también a la hora de impulsar el proyecto independentista: "Este proceso está en buenos manos, en las mejores manos posibles. Nos conocen y nos han visto trabajar", ha dicho en alusión a la ciudadanía.
Ha centrado su discurso en esta petición a los alcaldes y concejales, y no ha mencionado en ninguna ocasión al Gobierno central, que a través de su portavoz, Iñigo Méndez de Vigo, ha asegurado este mismo viernes que el 1 de octubre no habrá referéndum y que el Ejecutivo tomará medidas.
Constitución obsoleta
Puigdemont ha respetado como se hizo la Constitución de 1978 -"de arriba abajo" y con la amenaza de los militares, entre otras circunstancias-, pero ha concluido que hoy en día está obsoleta y que la independencia es una oportunidad para hacer un proceso constituyente catalán mucho mejor.
El presidente alega que solo una "minoría de ciudadanos" de hoy día pudo votar la Carta Magna y que una minoría aún inferior la avaló, por lo que concluye que es momento de hacer un proceso constituyente catalán con la participación de todos: los partidarios de la independencia y los que no lo son.
Considera que una forma de seducir a los no independentistas es invitándoles a colaborar en cómo debería ser una Cataluña independiente, y ha llegado a la conclusión de que "para hacer un buen país se tiene que hacer entre todos".
El president ha llamado a iniciar un proceso constituyente catalán con la participación de todos: los partidarios de la independencia y los que no lo son
"Decimos a los ciudadanos que cuando proponemos hacer un mejor país es que contamos con ellos. Que lo haremos conjuntamente. Incluso con aquella gente que no cree que sea buena idea que Cataluña sea un país independiente", ha concluido.
El presidente ha hecho este discurso ante unos 250 cargos municipales del partido, que tiene unos 400 alcaldes y más de 4.000 concejales en Cataluña. Entre los asistentes han estado consellers como Josep Rull, Jordi Baiget y Meritxell Borràs, y el vicepresidente primero del Parlament, Lluís Corominas.