No entra en los planes de Sánchez, al menos de momento, hacer cambios en su Gobierno y suprimir o unir algunos de los ministerios pese a la crisis económica. Desde el PP piden al presidente del Gobierno que suprima 10 ministerios tras la pandemia de covid-19 ya que, defienden, son gastos "superfluos" y a la mitad de los ministros "nadie les echará en falta".
El Gobierno de coalición supuso un aumento del número de carteras de las 17 que hubo en el primer Ejecutivo de Sánchez a las 23 que existen en la actualidad, un incremento que los populares ya criticaron cuando el líder del PSOE diseñó su gabinete.
También Vox se suma a las críticas. Para la formación de Abascal, el Gobierno presenta "una mastodóntica y extensa estructura" que supone un coste de 15,84 millones de euros anuales en sueldos de altos cargos. Es por ello que en mayo registraron una iniciativa en el Congreso para pedir que se reforme la Ley de Gobierno de 1997 y la Ley de Régimen Jurídico del Sector Público de 2015 y se fije un máximo legal de dos Vicepresidencias y 12 departamentos ministeriales. De esta forma el Consejo de Ministros estaría integrado por un máximo de 13 personas.
Ahora, con la crisis de la covid-19, el debate sobre una reforma en el Ejecutivo vuelve a estar sobre la mesa. En la anterior crisis financiera Mariano Rajoy redujo las vicepresidencias de dos a una y el número de ministerios pasó de 15 a 13. También limitó el número de asesores por ministro y secretario de Estado.
Universidades, Ciencia, Igualdad y Consumo
Son cuatro los ministerios que entre los expertos y los propios partidos se consideran más susceptibles de recortes o unificaciones: Ciencia, Universidades, Igualdad y Consumo. Precisamente, tres de estos cuatro son de Podemos, con Manuel Castells, Irene Montero y Alberto Garzón al frente.
"Estamos acostumbrados a que cuando hay crisis se reducen los ministerios y los reconcentran. En 2008 eliminaron Vivienda e Igualdad, que eran considerados como de segundo orden. Lo que pasa en este Gobierno, que es mucho más grande al ser una coalición, es que están muy desdoblados los ministerios", explica a Vozpópuli Silvia Claveria, profesora de Ciencias Políticas en la Universidad Carlos III.
En su opinión, los citados anteriormente son los que más papeletas tendrían de ser suprimidos en caso de que Sánchez decida hacer ajustes. Sin embargo, Claveria cree que a pesar de que haya una negociación interna y haya ministerios que tradicionalmente se han considerado de segundo orden, "va a ser difícil sacarlos porque tendrían que reasignar ese porcentaje que tiene Podemos". "No creo que le quieran dar otros más importantes. Siendo un Gobierno de coalición esta promesa (de recortes) no se puede cumplir tan fácilmente", apunta.
Es una decisión más vistosa que otra cosa"
En el partido morando, tal y como publicó este diario, creen que el perfil más débil ante una posible remodelación es el de Alberto Garzón, ministro de Consumo. El nombre de Castells, responsable de Universidades, también suena con fuerza después de protagonizar varias polémicas.
"Que Universidades no estuviera con Ciencia era raro desde el principio", apunta Claveria, que considera que este tipo de ajustes "no implican demasiado" a nivel presupuestario. "Es una decisión más vistosa que otra cosa", señala.
"Habría que hacer una reestructuración, y hay carteras, mínimo tres, que no son necesarias y que fueron asignadas para alcanzar un acuerdo de Gobierno", señala a preguntas de este periódico un analista político.