Yolanda Díaz mira a la izquierda madrileña para coger vuelo en la capital, pero pasa de Manuela Carmena, la única alcaldesa progresista que ha tenido Madrid en más de tres décadas. Y que lo fue, además, subida a una ola de unidad. La vicepresidenta segunda del Gobierno se está apoyando en Más Madrid, cuyos rostros más visibles -Mónica García y Rita Maestre- quieren ser una llave para Sumar. Y el 'carmenismo', ese elenco de políticos y técnicos que gobernaron y gestionaron bajo las órdenes de la exjueza, lanza un reproche a Yolanda Díaz: "Podría ser Manuela 2.0 pero pasa de ella". Lo cierto es que entre los suyos sentó mal que la también ministra de Trabajo rechazara, como contó este diario, hasta cuatro ofrecimientos de Carmena para sumarse a su movimiento.
Lo llamativo del asunto es que los paralelismos entre Carmena y Díaz son variados. Ambas son figuras detestadas por Podemos. La exalcaldesa es el demonio para los morados, que siempre lamentaron que no respondiera ante nadie pese a su apoyo. En plata: que fuera . Lo mismo que temen ahora con la vicepresidenta segunda. El primero que ya advirtió del riesgo de que la operación de Yolanda Díaz terminara igual que la de la exregidora fue el cofundador de Podemos Juan Carlos Monedero.
Pero hace tan solo unos días la secretaria general morada, Ione Belarra, también se acordó de Carmena en Radio Nacional de España: "Creo mucho en los debates colectivos y en que lo colectivo es lo que nos da fuerza. Por eso, hemos propuesto primarias [para Sumar], porque los proyectos personalistas no responden luego bien, ya se vio con Manuela Carmena, a lo que quiere la ciudadanía". Y es que las primarias, el casus belli entre Podemos y Sumar, también fueron la caja de pandora para Carmena y los morados.
Una cuestión de control
Cabe recordar que en 2015 la plataforma de la exalcaldesa (Ahora Madrid) organizó unas primarias que encumbraron a seis concejales de Podemos, una de Equo, tres de Izquierda Unida, cinco independientes y tres anticapitalistas. Cuatro años después Carmena quiso tener todo el control sobre sus listas y cambió el sistema de primarias que impidió a Podemos meter mano en la lista de nombres con los que Carmena quiso revalidar el poder. Lo que significó menos reparto de tarta para ellos. Y eso es, precisamente, lo que los morados no quieren que haga Díaz. Por eso, los de Ione Belarra advierten de que no quieren pactos "de despacho". Siguen pensando que como fragmento mayoritario de la izquierda, tienen que tener más voz que nadie.
El reproche del 'carmenismo' es, precisamente, que Yolanda Díaz desdeñe a una figura que llegó a gobernar en una ciudad que solo ha visto gobiernos conservadores en las últimas décadas. Porque piensan que tendría mucho que aportar. La exalcaldesa cuida mucho su legado y no quiere que lo manosee ningún partido. Se está viendo en esta precampaña electoral de cara al 28-M. Carmena se ha dejado ver con la candidata del PSOE, Reyes Maroto, con la de Más Madrid, Rita Maestre, y con el candidato de Recupera Madrid, Luis Cueto. Ella riega a la izquierda pero a nadie echa más agua.
Las batallas pasadas
En verdad, según las fuentes consultadas, lo que ha hecho imposible el entendimiento entre Yolanda Díaz y Manuela Carmena es el dardo que la exalcaldesa lanzó a Íñigo Errejón. El razonamiento político es el siguiente: dado que Más Madrid es la fuerza hegemónica de la izquierda en la Comunidad y en la capital a Yolanda Díaz no le queda más remedio que cumplir sus exigencias y apartar a una figura que en su día fue icónica para la izquierda capitalina. Ese es el gran problema que perciben las fuentes cercanas a Carmena en Díaz; que la vicepresidenta segunda es presa de los partidos por mucho que reitere que 'Sumar' no va a partidos.
Los partidos, de hecho, son un quebradero de cabeza para Díaz y Carmena. La exalcaldesa nunca fue una mujer de carné. Su entorno la define como una mujer íntegra e independiente. Es más, se revolvió antes que apoyar a Pablo Iglesias cuando este era candidato a la presidencia del Gobierno. "No recibo ni órdenes ni sugerencias de nadie", llegó a decir. Todo un recado que Yolanda Díaz calcó cuando anunció su candidatura en el polideportivo Antonio Magariños: "Yo, mujer, no soy de nadie".
La disputa entre Podemos y Yolanda Díaz revive batallas pasadas. Los morados no han superado aún la traumática ruptura de Vistalegre II que dividió al partido en dos y provocó la escisión de Más Madrid. Íñigo Errejón sigue enturbiando la mirada que el partido de Ione Belarra (y Pablo Iglesias) tiene sobre la política española. Y lo cierto es que, según ha sabido este diario, en Podemos ven a su examigo dispuesto a aliarse con la vicepresidenta segunda solo por un fin: creer que puede controlarla. Exactamente lo que pensaron en Podemos de Carmena.
S.Johnson
No se enteran. Carmena es una izquierdista militante, o viceversa, Yolanda es todo lo contrario, es UNA POLÍTICA, y por tanto tiene el único objetivo de un político, EL PODER. A Carmena el poder se la traía medio al pairo, para Yolanda es lo fundamental. Esa es la diferencia. No tienen nada que ver la una con la otra. Ni parecido.
Pepepelotas
Hombre no me gustan ninguna de las dos, pero la comparación no tiene parangón, es comparar a una señora cultivada con un engendro engaña bobos, vaga, incoherente y repudiada en su tierra y por sus colegas.
DANIROCIO
Pero Quien Es Carmena ,como La Gente La Recuerda Con El Tema De Lo De Atocha Ya La Da Como Una Buena Politica Y Lo Unico Que Hizo Como Alcaldesa Fue Nada De Nada Todo Lo Que Hizo Fue Descabellado Y Demasiado Sectario