El Pleno del Senado ha rechazado este miércoles un nuevo intento del PSOE para eliminar la figura del aforado en un debate en que las alusiones a la senadora Rita Barberá, que ha votado en contra, han sido continuas, algunas incluso exigiendo su renuncia inmediata al escaño. Barberá, a la que el Supremo investigará por supuesto blanqueo de capitales, ha seguido la discusión como este martes desde la última fila del hemiciclo, en su segundo día en el pleno como nueva senadora del Grupo Mixto.
La mayoría de la oposición ha expresado su incomodidad por su presencia, que para unos causa "recelo y desconfianza", según ha dicho el socialista Antonio Rodríguez Esquerdo, mientras a otros les hace daño el "espectáculo" que se da desde el Senado -es el caso de Carles Mulet (Compromis)- y a algunos incluso -como a Santiago Vidal (ERC)- les ofende. Estos últimos, según recoge la agencia Efe, han coincidido en responsabilizar al PP de la situación, así como en pedir a Barberá que no se aferre al escaño y renuncie al acta de senadora.
El senador de ERC ha recordado que es la tercera vez que la cámara discute sobre los aforamientos y ha recalcado que "el resultado es que sigue gozando del aforo una persona cuya presencia nos ofende a todos". "Ya que su partido no lo hace, le pido su dimisión inmediata", ha reclamado Vidal, al igual que el senador Mulet, quien le ha rogado que "dé un paso atrás por su bien y de las instituciones". Para Rodríguez Esquerdo, cuando un político se aferra a su escaño es porque confía más en unos tribunales que en otros, lo que, según ha dicho, no hacen los socialistas.
Vidal (ERC) ha pedido a Barberá que no se aferre al escaño y renuncie al acta de senadora
"Nosotros no nos tapamos en el burladero del escaño", ha afirmado y recordado el caso de Elena Diego, que "se fue del Senado y luego fue proclamada inocente". "Eso es dignidad", ha subrayado. Miren Gorrochaegui, de Unidos Podemos, ha pedido a los 'populares' que actúen y les ha recordado que "Calígula cuando enloqueció nombró senador a su caballo" y que "la mujer del César no sólo tiene que serlo, sino parecerlo".
"Lo lamentamos mucho, pero a esta cacería que ustedes han organizado y algunos sumado entusíasticamente, no le vamos a acompañar", ha advertido la senadora del PP Rosa Vindel, que ha cerrado el debate con estas palabras y el aplauso de la bancada 'popular'. Ha contrastado la actitud actual de los socialistas con la que mantuvieron cuando los expresidentes andaluces José Antonio Griñán y Manuel Chaves, ambos relacionados con el caso de los ERE, ocupan sus escaños del Senado y el Congreso, respectivamente.
El PP usa su mayoría absoluta
"El silencio socialista fue atronador", ha criticado Vindel, que ha subrayado que "igualdad parlamentaria es dar el mismo trato dado a otros senadores en similares circunstancias". Por lo demás, se han repetido las posturas expresadas el pasado 29 de marzo, cuando el Pleno del Senado debatió una moción similar del PSOE para pedir la eliminación de la figura del aforado para los senadores, diputados y parlamentarios autonómicos al considerarla un "privilegio" y un "escudo" que vulnera el principio de igualdad.
Hoy, como entonces, el PP ha hecho valer su mayoría absoluta en la Cámara Alta -con el apoyo de Rita Barberá en esta ocasión desde el Grupo Mixto- al considerar que la reforma constitucional necesaria para acabar con los aforamientos requiere un debate y un consenso previo y no se puede acometer con un Gobierno en funciones. No obstante, sí ha habido una diferencia. Si bien, hoy la exalcadesa valenciana ha protagonizado gran parte del debate, en aquella ocasión su nombre no fue mencionado en ningún momento.