La portavoz del Ayuntamiento de Madrid, Rita Maestre, ha dejado claro este miércoles que no ha ofrecido su dimisión a la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, por su imputación debido a una protesta en una capilla de la Complutense en 2011: "Ambas hemos hablado y hemos decidido que no es necesario porque esta cuestión no afecta a mi trabajo de portavoz".
Además, ha asegurado que relató el asunto a Carmena prácticamente cuando la conoció, y que ni ésta ni el resto del equipo vieron ningún problema. "A todos les pareció que no contravenía el código ético y los valores de Ahora Madrid, sino que entroncaba muy bien la defensa de la laicidad con nuestro programa y con nuestro espíritu", ha dicho en declaraciones a Radiocable recogidas por Europa Press.
Pablo Iglesias insiste en que le preocupan más las cuentas en Suiza que las cuentas en Twitter
En cuanto a la petición del portavoz socialista de que dé un paso atrás hasta que se resuelva su imputación, Maestre ha respondido que hay que diferenciar una imputación por mal uso de fondos públicos de las que son participar en una "protesta pacífica" como "parar un desahucio". "Somos gente normal que tenemos un pasado activista del que no nos avergonzamos sino que nos orgullecemos", ha dicho.
Iglesias apoya a Maestre
Por su parte, el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, cree que Maestre "en ningún caso" debe dimitir. Ha asegurado que a él no le gustó la protesta y que sus participantes "se equivocaron", pero que fue "una acción pacífica". Incluso en el caso de que fuese condenada, Iglesias ha replicado que "la clave son las causas" y ha recordado a los "muchos demócratas condenados en España "por luchar por la democracia". "Los demócratas sabemos que lograr la extensión de los derechos civiles a veces conlleva iniciativas contrarias a Derecho", ha argumentado.
Es más, se ha referido a la lucha por los derechos civiles en Estados Unidos y ha opinado que "esas cosas contribuyen a tener sistemas democráticos mejores" y que si España se convierte en un país con universidades públicas "sin capillas ni mezquitas" será "un avance en la laicidad", "respetando la libertad de culto de cada uno pero no en la Universidad".
En su opinión, la imputación de un político es grave cuando se trata de casos de corrupción. Es más, cree que en un país donde los políticos tienen un pasado de cuentas en Suiza, es sano que haya algunos cuyo pasado es la actividad política. En una entrevista concedida a Radio Nacional, recogida por Europa Press, Iglesias ha hecho mucho hincapié en que la protesta "fue pacífica" y en que él no ha visto ningún vídeo que demuestre que los manifestantes gritasen cosas como "arderéis como en el 36".
"No fue un asalto"
Así, ha dicho que lo de la capilla no fue "un asalto", que "se hace con armas, se mata gente", sino una "acción pacífica", y lo ha distinguido del "asalto, aquí sí", a la librería Blanquerna, centro cultural de la Generalitat en Madrid, por parte de un grupo de neonazis en la Diada de 2013. "El asalto de esos neonazis fue violento y lo vimos todos, creo que no es comparable y no es bueno utilizar esa metodología", ha zanjado.
Iglesias también ha apoyado que siga como concejal de distrito Guillermo Zapata -"es un valor como concejal"- y cree que dejando la cartera de Cultura ya ha asumido su responsabilidad por unos tuits que fueron "un error". A su modo de ver, "Zapata se confundió" porque un debate sobre humor negro en un foro público "trasciende el contexto que les quiere dar quien genera ese debate", pero "nadie puede poner en duda que no es antisemita ni racista".
"Somos gente normal que tenemos un pasado activista del que nos orgullecemos", sostiene Maestre
Además, ha insistido en que a él le preocupan más las cuentas en Suiza que las cuentas de Twitter y cree que son los que han "asaltado las instituciones" los que deberían dimitir en vez de "rasgarse las vestiduras".
No le preocupa que Hernando "diga estupideces"
Es más, cree que por "muy repugnantes" que le parezcan las palabras del 'popular' Rafael Hernando sobre las víctimas del franquismo, o el homenaje a los caídos de la División Azul por parte del ministro Jorge Fernández Díaz, eso no es motivo de dimisión, pero sí "robar" a los ciudadanos. "A mí no me preocupa que el señor Hernando diga estupideces o, aunque me duela mucho, que se homenajee a una parte del Ejército nazi, me preocupa que me roben", ha recalcado.
Según ha dicho, en los últimos días ha hablado "por Whatsapp" de la presión sobre el Ayuntamiento de Madrid con la alcaldesa, Manuela Carmena, y también con Guillermo Zapata, al que le avanzó que el martes pensaba hacer un chiste sobre él durante la concesión del Premio Limón. "Su respuesta fue 'me parece fabuloso porque yo no voy a poder hacer más bromas en lo que me queda de vida'".