El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha afirmado este martes que la reforma fiscal que contempla la subida de algunos impuestos prevista por el Ejecutivo de coalición se acometerá una vez que se consolide la recuperación y se recuperen los niveles de PIB previos a la pandemia del coronavirus, ante la previsión de unas cifras de déficit y deuda pública "enormes" y para reforzar el estado de bienestar y la sanidad.
Durante su comparecencia en La Moncloa para hacer balance de gestión al cierre del curso político, tras la celebración del Consejo de Ministros y antes de las vacaciones, Sánchez ha asegurado que se acometerá la reforma fiscal prevista cuando se produzca el momento de "consolidación" de la recuperación económica y se registren los niveles de crecimiento previos a la crisis.
En ese momento "tendremos ya las garantías y el contexto para abordar una necesaria reforma estructural", ha afirmado Sánchez, quien ha criticado que en la "agenda conservadora" no figuren reformas estructurales para el ámbito fiscal. "Mira que hay gente que le gustan las reformas estructurales, pero cuando se habla de fiscal, entonces no le gusta, pero tenemos que hacerla", ha apostillado.
En este sentido, ha defendido la necesidad de cambios impositivos "con justicia", ya que hay "muchísima gente" que considera que hay personas que pagan menos impuestos incluso siendo más ricas. "Necesitamos tener una recaudación mucho más sostenible y estable a lo largo del ciclo económico" ante la previsión de incurrir en cifras "enormes" de déficit y deuda pública y con el fin de sostener empresas y trabajadores durante la pandemia, ha explicado.
Por ello, una vez que se consolide la recuperación y se consigan unos niveles de PIB "semejantes" a los de antes de la pandemia, se acometerá dicha reforma con el fin también de salir de la crisis con un estado de bienestar y una sanidad "más fuerte".
Las medidas previstas
Entre las medidas impositivas recogidas en el acuerdo de coalición se incluía un tipo mínimo del 15% en Sociedades, del 18% para banca y petroleras, un gravamen del 5% de los dividendos a empresas, la creación de las tasas 'Tobin' y 'Google' (ya aprobadas en el Congreso), un aumento del IRPF a las rentas altas; una subida del 1% en Patrimonio a fortunas de más de 10 millones, la equiparación del diésel con la gasolina o una nueva ley de lucha contra el fraude, entre otros.
A estas medidas se suman la creación de un nuevo impuesto sobre los envases de plástico no reutilizables y, según ha avanzado Sánchez en su comparecencia, una revisión de la fiscalidad de la alimentación en los próximos meses.
El líder del Ejecutivo ha asegurado que la recuperación tomará un ritmo mayor en 2021 y se acelerará en 2022, gracias al acuerdo "histórico" logrado en Europa sobre el fondo de 750.000 millones, para rebasar incluso en 2023 la situación económica previa a la crisis.