La sequía en España ha aumentado un 23 por ciento respecto al año pasado y se sitúa en 23.798 hm3 mientras que en el mismo período de 2018 fue de 31.006 hm aunque para el meteorólogo de Meteored José Antoino Maldonado, esta situación "no tiene que ver con el cambio climático".
El año agrícola abarca desde el 1 de septiembre de 2018 hasta el 31 de agosto. Durante este período, Meteored señala que las lluvias han sido escasas y que las tormentas han causado "graves" daños en cosechas de numerosos puntos de la Península, lo que ha afectado gravemente a viñedos, almendros, frutales, hortalizas, olivos y cereales.
En todas las cuencas hidrográficas hay menos agua embalsada que en septiembre del año pasado, exceptuando las de Galicia-Costa, Miño-Sil, Segura y Júcar.
Por ámbitos, la cuenca hidrógráfica del Cantábrico Occidental tiene 364 hm3; el Cantábrico Oriental 54 hm3; el Miño-Sil 1998 hm3; Galicia Costa con 474 hm3; las cuencas internas del País Vasco con 15 hm3 y las cuencas internas de Cataluña con 403 hm3.
Además, el Duero tiene 3.348 hm3; el Ebro 3.809 hm3; Guadiana con 3.620 hm3; Tinto y Odiel 145 hm3; Guadalquivir 2.929; las cuencas andaluzas 623 hm3; el Segura 296 hm3; Júcar 1.008 hm3 y por último el Tajo con 3.922 hm3.
La sequía más perjudicial de los últimos tiempos fue de 1944 a 1946
Desde Meteored apuntan a que la sequía actual no es una situación "extraña ni reciente", porque ha habido épocas anteriores al calentamiento global en las que las sequías eran frecuentes, como por ejemplo, la ocurrida de 1944 a 1946 que ha sido la "más perjudicial" de los últimos tiempos. "El Ebro casi no llevaba agua a su paso por Zaragoza y en Madrid desapareció, literalmente, el río Manzanares", destaca Meteored.
Otra de las grandes sequías que han tenido lugar en España fue de 1979 a 1983 que afectó al este y al sur de la Península, y provocó que se restringiese el agua para consumo doméstico. Algo similar ocurrió de 1991 a 1995, cuando en toda la Península se limitó el consumo del agua.