No hay espacio para tanto cadáver. El coronavirus ha azotado las grandes urbes, con Madrid y Barcelona como mayores epicentros de la pandemia. Un colapso que da lugar a imágenes difíciles de digerir. Es el caso del aparcamiento del tanatorio de Collserola, espacio que se ha habilitado como depósito de contingencia para albergar decenas de féretros. Es la imagen de la tragedia.
Decenas de ataúdes, dispuestos en hileras, en un espacio a media luz. Son tantos los féretros que su presencia se difumina en la oscuridad. Cada uno de ellos lleva una tarjeta para identificar al fallecido. La fotografía de Quique García, de EFE, refleja la magnitud del desbordamiento.
El aparcamiento del tanatorio consta de tres plantas. Las autoridades funerarias lo han habilitado para dar espacio a los cadáveres. Recordemos que Cataluña, con 2.093 fallecidos -según los datos de Sanidad- es la segunda Comunidad Autónoma con mayor número de víctimas del coronavirus. Se acumulan los trabajos de sepultura ante la avalancha de casos de los últimos días.
Se acondiciona todo el aparcamiento
Según detalla la agencia EFE, el tanatorio de Collserola trabaja en acondicionar todo el aparcamiento para que se convierta en depósito en esta época de emergencia. Los féretros se guardan a baja temperatura para evitar problemas sanitarios. Una medida con la que se pretende evitar la acumulación de cadáveres en los centros sanitarios.
Hasta la fecha han muerto 10.003 personas en toda España. La crisis del coronavirus ha obligado a las autoridades a abrir otras morgues improvisadas, como el Palacio de Hielo o la frustrada Ciudad de la Justicia, ambos en la Comunidad de Madrid.
Espacios que ya suponen la zona cero de una tragedia sin precedentes.