Al comprar productos de carne o pollo lo más probable es que nada más llegar a casa separemos varios filetes para consumir y los otros los guardemos en el congelador. Una operación muy habitual en todas las casas, ya que la mejor manera de mantener estos productos frescos y en buen estado es congelarlos. Gracias a este método podemos aprovechar ofertas de los supermercados y así ahorrarnos un dinero que nunca viene mal para llegar en números positivos a fin de mes.
El mayor problema con los alimentos congelados es que para prepararte la comida del día siguiente tienes que sacarla mínimo 12 horas antes del frigorífico. Qué es lo que pasa, que la mitad de las veces se nos olvida y la sacamos deprisa y corriendo tres horas antes, un intervalo de tiempo que no es suficiente para que el producto este a temperatura ambiente. Meterlo al microondas, darle un golpe de calor con agua caliente... Hay mil maneras descongelar la carne que, la mayoría, no sirven para nada y lo que hacen es estropear el producto. Por ello, te contamos el truco definitivo para descongelar la carne en tan solo cinco minutos.
El truco que pocos conocen para descongelar la carne en cinco minutos
Hay que recordar que, aunque con este truco vayas a descongelar la carne en cinco minutos, no es lo más recomendado. De hecho, la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) es bastante radical con este tema y aclara que, en primer lugar, lo ideal es mantener este tipo de productos en unas temperaturas inferiores a -18 grados. Algo lógico y con lo que evitaremos que la carne se pudra o se ponga en mal estado. En segundo lugar, a la hora de consumirla, lo mejor es sacarla del propio congelador y dejarla que se vaya descongelando de manera natural, hasta llegar a una temperatura interna óptima para el consumo.
¿En qué consiste el truco para descongelar la carne en cinco minutos? Un tip que pocos saben, pero que es muy útil. Para ello, se necesitan dos ollas grandes y una bolsa de plástico, preferentemente apta para alimentos, en la que vamos a introducir el trozo que queremos descongelar. Una vez que tenemos todos los utensilios que necesitamos para realizar el truco, cogemos una cazuela y calentamos agua hasta que llegue a punto de ebullición. Mientras aprovechamos el tiempo para coger la otra olla y ponerla boca abajo en el fregadero.
Pasado unos minutos, introducimos el trozo de carne en la bolsa para alimentos y la colocamos en la olla que tenemos boca abajo. Cuando veamos que el agua está bien caliente, sacamos la olla del fuego y la apoyamos encima de la carne. En cuestión de cinco minutos la carne estará perfectamente descongelada y lista para cocinar. Un detalle a tener en cuenta es que este truco se puede efectuar con trozos pequeños de carne o pollo y no con piezas de gran tamaño.