La labor de los abogados y procuradores del turno de oficio sigue siendo, en gran parte, desconocida. Profesionales de la Justicia que desempeñan una labor social para que cualquier ciudadano pueda disfrutar de un derecho básico: una asistencia jurídica gratuita. Un desempeño arduo, sin horarios y, sobre todo, mal pagado. Los trabajadores de este colectivo llevan años soportando condiciones "indignas" y arrastrando las consecuencias de percibir una remuneración que no es suficiente para llegar a fin de mes.
Tras décadas sin ningún cambio en sus condiciones laborales, el turno de oficio ha decidido colgar la toca y convocar una huelga indefinida desde el pasado 21 de noviembre. Este jueves, alrededor de 200 abogados y procuradores de oficio se han concentrado en los Juzgados de Plaza Castilla para plantar cara al Gobierno y a las instituciones y exigir mejoras inmediatas.
Entre los manifestantes, cientos de historias personales, carreras profesionales repletas de experiencias gratificantes y otras, no tanto, que ponen de relieve las problemáticas a las que se enfrenta día a día este colectivo. Vivencias como las de Belén, Irma, Luis o Ana María, quienes cuentan a Vozpópuli los entresijos del turno de oficio.
Irma Muñoz se colegió en el año 1991, desde entonces ejerce como abogada del turno de oficio. La letrada explica con una sonrisa en la cara que en los 32 años que lleva trabajando como colegiada, nunca ha sido testigo de un momento histórico como este: "Jamás la abogacía se había unido, ni mucho menos con los procuradores".
Denuncia el "nivel de corporativismo que existe en la profesión" y pide a los colegios de abogados de toda España que se unan para crear un estatuto jurídico con las obligaciones y los derechos del turno de oficio. Muñoz cuenta a este medio que la falta de un estatuto fijo no permite que ella y sus compañeros puedan disfrutar de un horario como el del resto de trabajadores.
Jornadas de 24 en el turno de oficio
La abogada subraya que la compensación económica que cada profesional recibe por un procedimientos, que no por horas, le ha obligado en muchas ocasiones a cargarse con trabajo de más para poder cobrar un sueldo digno.
"Yo he estado infartada y a los dos meses me he dado de alta, porque había que seguir trabajando, porque si no realmente lo que te pagaban era paupérrimo"
Muñoz denuncia, además, las irregularidades que los abogados del turno de oficio tienen que sufrir a la hora de cobrar por su trabajo, ya que, según detalla, cada mes recibe el pago por sus actuaciones un día diferente. Explica, también las dificultades que esto acarréa a la hora de, por ejemplo, solicitar un préstamo bancario. "Si no tienes una nómina mensual... Encima, mal pagado. Te levantan en una guardia a las 3 de la mañana y a lo mejor te levantan por 200 euros, añadiendo además que te imponen la retención del IRPF".
Entre las principales reclamaciones de los profesionales del turno de oficio se encuentra el derecho a la conciliación familiar y a la desconexión. Si alguien está de baja, debe recurrir a otro compañero para que se presente a la vista o el caso pasará a estar en manos de otro abogado.
La letrada cuenta que ha tenido que ir a cubrir una guardia pocas semanas después de dar a luz. "Mi hijo nació un 5 de septiembre y en octubre yo estaba aquí de guardia. He llegado a tener que dar a mi hijo el pecho en los calabozos", afirma.
Condiciones de los procuradores
Los retos a los que se enfrentan los profesionales de la procura no son menores. Luis De Argüelles González lleva 29 años colegiado y, desde entonces, como labor obligatoria para cualquier procurador, trabaja en el turno de oficio. El licenciado explica que este requisito imperante en su especialidad les obliga a tener que pagar a otro compañero si no pueden cubrir un oficio. "A nosotros nos hacen dos señalamientos de turno de oficio y tienes que pagar a un compañero que te sustituya. Con lo cual, ya te cobra más el compañero que lo que estás ganando por turno de oficio", señala.
Según detalla De Argüelles, la Comunidad de Madrid les pagan 40 euros por los asuntos del turno de oficio, mientras que el Estado, les bonifica 30 euros adicionales, a lo que hay que quitarle la retención del 15% por el IRPF.
El experto narra una de sus peores experiencias como procurador del turno de oficio. Hace pocos meses, tuvo que llevar una macrocausa en la Audiencia Nacional que duró seis años.
"Hicimos la cuenta de la macrocausa y salíamos a 50 céntimos al mes, con 30 notificaciones diarias y seis años de trabajo"
Belén García, secretaria general del Sindicato de Abogados Venia, tiene que compaginar su trabajo con la crianza de sus tres hijos, así como con otros proyectos profesionales y laborales. Desde hace 15 años, esta madre de familia ofrece sus servicios al turno de oficio, más de una década de labor jurídica en la que ha tenido que soportar jornadas maratonianas por apenas unos euros.
La letrada desglosa que en el año 2008, los abogados del turno de oficio se vieron sometidos a una rebaja salarial del 30%, para paliar los efectos de la crisis que atravesaba España en esos momentos. Desde entonces, no se ha actualizado y los efectos siguen haciendo mella en el bolsillo de los trabajadores del colectivo.
García describe situaciones en las que ha sido testigo de como ella misma y otros compañeros han tenido que soportar a clientes con los que no podían trabajar en condiciones óptimas sin poder renunciar a su denfensa. "Nosotros no podemos renunciar a los clientes. Tenemos que continuar hasta el final, aunque nos insulten, aunque nos estén machacando, aunque nos estén acosando... Esto debe parar, no podemos permitir que no se nos suspenda un procedimiento judicial porque estamos enfermos. No podemos permitir que no se suspenda un procedimiento judicial porque tenemos otro juicio el mismo día y a la misma hora", denuncia.
Derecho a huelga
Ana María Casanueva, abogada del turno de oficio desde hace 15 años, no ha podido acompañar a sus compañeros en la convocatoria de este jueves. A pesar de estar de huelga, ha tenido que cubrir una guardia de servicios mínimos que no le ha permitido asistir a la manifestación celebrada frente a los Juzgados de Plaza Castilla.
No obstante, Casanueva detalla que ella -a diferencia de otros profesionales- han podido disfrutar libremente de su derecho a huelga. Decenas de juzgados están aprobando las suspensiones solicitadas por los letrados. No obstante, existen casos en los que los jueces no han reconocido este derecho a los profesionales del turno y han denegado o atrasado las suspensiones.
Abogados Venia denuncia que el Ministerio de Justicia, el Abogado del Estado y los propios colegios de abogados han enviado cartas a los juzgados diciendo que "no se puede suspender porque los trabajadores de oficio no tienen derecho a huelga". Desde el sindicato afirman que se les ha solicitado a algunos compañeros sus números de colegiado y que han sido amenazados con la apertura de un expediente disciplinario si continuaban con los parones.
El Sindicato de Abogados Venia pide que se escuchen sus reivindicaciones y que el Gobierno dé pie a la apertura de una mesa de negociación, como la que ya existe con otros profesionales de Justicia como jueces, fiscales o funcionarios.