El Consejo de Economía y Finanzas de la UE (Ecofin) aprobará hoy el endurecimiento de las normas para la venta en corto al descubierto y para limitar la especulación con la deuda soberana, y adoptará una posición común sobre el control previo de los presupuestos de los países del euro.
La normativa se aprobará tras el acuerdo de octubre pasado entre los países de la UE, la Comisión Europea (CE) y la Eurocámara, y llega después de que la semana pasada varios estados que habían prohibido la venta en corto, entre ellos España, levantaran el veto, lo que provocó el desplome de las entidades financieras españolas en la bolsa y una reducción de su valor en 5.411 millones de euros.
En concreto, la Unión Europea (UE) endurecerá las normas para la venta en corto al descubierto de acciones y bonos y prohibirá las transacciones al descubierto de los seguros de impago vinculados a la deuda soberana. Los estados miembros tendrán la posibilidad de "salirse" temporalmente de la prohibición previa autorización de la Autoridad Europea de los Mercados de Valores (ESMA, en inglés), pero solo bajo casos clara y objetivamente definidos.
El levantamiento de la prohibición solo podrá aplicarse durante un máximo de 12 meses, renovables por periodos de hasta seis.
Informar al regulador y al mercado
Para la venta en corto al descubierto de acciones, la norma prevé que se tenga que informar de las posiciones cortas al regulador y, en ciertos casos, al mercado.
Además, tanto en el caso de acciones como de bonos, un inversor tiene que tener prestado el instrumento financiero afectado, haber entrado en un acuerdo para prestarlo o tener un pacto con una tercera parte que confirme que la acción está localizada y que ha tomado medidas para que el inversor pueda tener "expectativas razonables" de que se ejecutará el acuerdo.
En el caso de los bonos soberanos, habrá un régimen específico para las notificaciones a los reguladores, que solo tendrán que hacerse con posiciones netas importantes en bonos de la UE.
La norma otorga además más poderes a la ESMA y a las autoridades nacionales para imponer medidas temporales si hay una gran caída en el curso, como restringir la venta en corto y transacciones con seguros de impago de deuda (credit default swap o CDS).
Refuerzo a la supervisión de presupuestos
Por otro lado, los ministros de Finanzas de la UE prevén adoptar hoy una posición común sobre dos reglamentos que permitirán a la CE revisar los proyectos presupuestarios y reforzar la supervisión de aquellos que experimenten graves turbulencias financieras o soliciten un rescate.
En el Ecofin de enero, se mostraron a favor de que todos los miembros de la eurozona envíen sus presupuestos a la CE para un control previo y también apoyaron que el Consejo pueda efectuar recomendaciones para animar a un país en severas dificultades financieras a que pida ayuda del fondo de rescate.
Solicitaron, no obstante, "confidencialidad" suficiente como para evitar que eso provoque una reacción negativa de los mercados y dispare la desconfianza sobre la situación de un país.
El diario británico "Financial Times" afirma que el nuevo borrador elimina la posibilidad de que el Ejecutivo comunitario pueda forzar a un país a solicitar un rescate, aunque podrá decidir unilateralmente cuándo un país debe ser objeto de una supervisión reforzada. Esa supervisión será obligatoria para los países rescatados pero otros estados miembros que experimentan graves dificultades financieras podrían asimismo tener que aceptar equipos sobre el terreno, sostiene el diario.
El texto también requiere a la eurozona "consultar" a la Comisión antes de adoptar importantes reformas fiscales que pudieran afectar al área de la moneda común, y someter sus planes de subastas de bonos.