La Guardia Civil ha detenido en la provincia de Valencia a tres personas que se dedicaban a comerciar sin autorización con test rápidos de covid-19, que también eran realizados a clientes en las trastiendas de una ferretería y un bazar.
Según informó este viernes el Instituto Armado, los cinco arrestados son dos hombres y una mujer con edades comprendidas entre 39 y 47 años, que serán acusados de un delito contra la salud pública. En la operación han sido intervenidas 3.300 pruebas rápidas que fueron adquiridas sin ningún permiso a diversas empresas.
La investigación se inició tras conocerse, por medio de una empresa farmacéutica, que se estaban realizando sin autorización test rápidos de coronavirus en una ferretería de la localidad de Pobla de Vallbona y en un bazar de Manises.
Por tal motivo, los agentes realizaron una inspección en dicho establecimiento, en cuya trastienda había una bolsa con una caja de test de covid-19 junto con diferentes utensilios para su uso. Igualmente, se pudo observar que algunos de los test habían sido utilizados anteriormente.
Varios proveedores
Por todo ello, se procedió a la aprehensión de dichos objetos y se acusó al responsable del establecimiento de un delito contra la salud pública. Las pesquisas permitieron averiguar que esta persona contaba con un contacto y varias empresas que le ofertaban la compra de los test rápidos.
Con la documentación que aportó el primer investigado y las gestiones realizadas por los agentes, se han llevado a cabo varias inspecciones en establecimientos y empresas de las localidades de Polba de Vallbona, Paterna, Catarroja, Torrente, Manises y Valencia. En estas poblaciones fueron localizadas más de 3.300 unidades de test rápidos de coronavirus de diversas marcas.
De dichas inspecciones se detectó que las empresas ubicadas en las poblaciones de Catarroja y Paterna son las que abastecían al bazar de Manises y la ferretería de Polba de Vallbona, que las vendían de forma fraudulenta.