España

Vox mantiene su escalada frente a un PP en caída libre

El pulso entre Génova e Isabel Díaz Ayuso durante los dos últimos meses coincide con el ascenso imparable de Vox y el debilitamiento progresivo del PP, según la serie de

  • El líder de Vox, Santiago Abascal (i), y el líder del PP, Pablo Casado. Eduardo Parra / Europa Press.

El pulso entre Génova e Isabel Díaz Ayuso durante los dos últimos meses coincide con el ascenso imparable de Vox y el debilitamiento progresivo del PP, según la serie de encuestas de IMOP-Insights para El Confidencial. Si se celebrasen hoy las elecciones generales, los de Santiago Abascal obtendrían el 19,1% de los votos y 68 diputados, mientras que los 'populares' de Pablo Casado se quedarían en el 24,7% de los apoyos, con 101 escaños.

El observatorio electoral del citado medio del pasado 27 de octubre mostraba que el Partido Popular sería el claro vencedor en unas hipotéticas elecciones con el 28% de los apoyos y 120 representantes en el Congreso de los Diputados, muy por encima del PSOE, con el 25,8% de los electores y 101 asientos. Pero la crisis interna en el partido ha invertido la tendencia en favor de Vox, que avanza notablemente. Con esta fecha como referencia, los de Abascal tendrían en este momento 776.000 votos y 16 escaños más, mientras que los de Casado se dejarían en el mismo periodo cerca de 800.000 papeletas y 19 diputados.

Los márgenes entre ambos partidos son cada vez más estrechos, lo que trastoca las estrategias de cara a las próximas elecciones en Castilla y León, el 13 de febrero, o en Andalucía, todavía sin convocar. El plan de Casado de forzar gobiernos monocolor y evitar coaliciones con Vox en comunidades y ayuntamientos ha caducado en apenas dos meses. En ese tiempo, ha pasado de un escenario cómodo y optimista, con una ventaja holgada de 12,1 puntos y 49 escaños sobre sus posibles socios, a uno mucho más comprometido, con una distancia de 5,6 puntos y 33 diputados.

Otro dato curioso del observatorio es que el auge y la fuerza de Vox trascienden de la derecha y también araña en la izquierda. Abascal ya recibe votantes socialistas y de Podemos, con 240.000 apoyos procedentes de los primeros y otros 143.000 de los segundos. Este fenómeno, aunque todavía es incipiente y solo representa al 8% de su electorado, se reconoce como una consecuencia muy evidente de la actividad que despliega en compañía de su sindicato, Solidaridad, en pugna con las organizaciones clásicas y vinculadas a la izquierda. Ahora, el objetivo de Vox es aprovechar el desencanto de las clases obreras.

Pese a todo, el bloque de la derecha se mantiene estable en los 172 escaños, a cuatro de la mayoría absoluta y 6,8 puntos por encima de la izquierda, mientras que Ciudadanos sobrevive con un solo escaño por Madrid.

Los datos de la misma encuesta, realizada entre el 6 y el 17 de diciembre, muestran además que en dos meses la fidelidad de los votantes de Abascal ha pasado del 70 al 84%, mientras que los de Casado han bajado del 77 al 71% El 7% de los votantes del PP en los comicios de noviembre de 2019 (350.000 electores) ya no tiene tan claro que vaya a repetir, y lo que antes era un voto decidido ahora solo es probable. No obstante, los 'populares' aún siguen por encima de sus resultados en esas elecciones, en las que obtuvieron el 20,8% de los votos y 89 escaños.

Izquierda

Por otro lado, la crisis del PP auparía al PSOE, que aunque sigue estancado ganaría los comicios con el 25,7% del electorado y 103 diputados, dos más que los 'populares'. Con el desgaste de la pandemia o sus concesiones a los nacionalismos, entre otras polémicas, Pedro Sánchez perdería en este momento 560.000 votos y 17 escaños respecto a 2019. Un nuevo Gobierno 'Frankenstein' tampoco sería posible con las sumas actuales. La mayoría de los Presupuestos se quedaría en 165 diputados, por lo que sería obligatorio el apoyo de Junts, BNG y la CUP. Los partidos nacionalistas se mantienen estables, con una tendencia ligeramente alcista en la CUP y Bildu.

Finalmente, los datos confirman un fenómeno que ya se dejó entrever en el último observatorio. El efecto Yolanda Díaz es cada vez más evidente y se reconoce tanto en el crecimiento de Podemos como en el debilitamiento de Más País. Con la primera encuesta como referencia, del pasado 15 de septiembre, se aprecia un auge lento y progresivo de los morados, que pasan del 10,8% de los votos y 26 diputados al 11,8% y 30 asientos. Los votantes de Íñigo Errejón, en cambio, parecen haber encontrado una alternativa y hoy solo cosecharía el 1,9% de los electores, con dos representantes.

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