Se acercan las celebraciones navideñas y te proponemos tres restaurantes muy especiales. Adelántate a las fiestas y disfruta de espacios muy singulares y con sello propio en los que gastronomía y vinos brillan de una forma diferente. Antes de que todo esté lleno hasta la bandera o tengas problemas de espacio, en Gastrópoli te recomendamos unos lugares en los que empezarás a celebrar… y no terminarás.
Lienzo: Arte, vinos y gastronomía
Tres facetas perfectamente ensambladas en este restaurante valenciano, donde la chef Maria José Martínez, junto a su marido Juan José Soria, dibujan cada jornada una representación de lujo y delicadeza, plato tras plato y vino tras vino. Ubicado en el centro de la ciudad, Lienzo fue galería de arte y exhiben exposiciones temporales de reputados artistas locales. Ahora el arte está en el plato y en la mesa se van sirviendo singulares creaciones de esta cocinera que aboga por el kilómetro cero con los ricos productos de su tierra. Aquí se hace cocina de vanguardia en una feliz pareja con las materias primas más auténticas, del mar o de la huerta valencianas.
Un comedor en tonos blancos y con cocina a la vista es el relajado escenario donde la chef va desgranando sus platos de temporada, desde la ‘calabaza alcalinizada con terrina de anguila de la Albufera y salsa de arrope y teriyaki’ en una magistral fusión de la terreta con Japón a la ‘Verdura en dos pilpiles y huevos de mújol cocida en barro’ o un delicioso arroz de escorpa (cabracho), son algunos de los platos que actualmente conforman su menú de otoño.
Pero uno de los puntos fuertes de la cocina de Martínez es la miel, la cera y todo lo que rodea el mundo de las abejas. Ella y su marido son los que han pergeñado las “colmenas urbanas” y elaboran sus propias mieles, entre ellas una muy especial de palmera que posee un aterciopelado sabor a bosque. Como buenos exponentes de esta vía hay algunos platos representativos: quisquillas cocinadas en cera de abeja (con un crujiente en forma de abeja y polen fresco) o el postre de cera de abeja con nata y helado de vaca fresca. Dos opciones a tener muy en cuenta y plenos de originalidad.
No faltan ingredientes de cercanía para preparaciones como el ‘Barro de arcilla con ajetes y judías, pilpil de chufas y huevas de mújol en salazón ralladas’, con una original presentación en sala, o el ‘Cordero con boniato morado’.
Los menús Trazos, Pinceladas y Lienzo (corto, mediano y largo) tienen un precio de 40, 55 y 70 euros respectivamente y sin vinos. El capítulo vinos es toda una sorpresa con 200 referencias en carta a cargo de Soria, de vinos nacionales e internacionales, junto a un espectacular apartado de etiquetas levantinas. Déjese llevar por él para descubrir las últimas novedades, esas rarezas de ediciones limitadas… estarás en buenas manos.
Ambivium, por la enología y la alta cocina
¿Quieres vivir una experiencia de alta cocina en torno al vino y dentro de una preciosa bodega situada en pleno Ribera del Duero?. No lo dudes. Éste es tu sitio. El restaurante Ambivium, situado en Pago de Carraovejas (Peñafiel, Valladolid) es único en el mundo por funcionamiento y filosofía.
Pedro Ruiz Aragoneses, CEO del Grupo Alma, que integra también otras bodegas en distintas zonas, apostó por Ambivium y lo hizo a lo grande. Aquí todo gira en torno al vino y las raíces castellanas del entorno se ven en cada plato, aunque llevadas a un nivel superior de sesgo vanguardista.
Un amplio comedor, con mesas muy separadas, dan la bienvenida al cliente para comenzar una espectacular coreografía de copas- se utilizan en total unas 1.300 en cada servicio- que contendrán vinos de todo el mundo. En 2017 abrieron sus puertas, pero la experiencia ha cambiado meridianamente.
En carta ofrecen más de 3.000 referencias entre vinos, sakes y destilados con verdaderas joyas: vinos internacionales, ya descatalogados, de añadas únicas, verticales de impresionantes etiquetas… muchos vinos que actualmente no se pueden conseguir. Botellas inaccesibles que el comensal podrá probar a lo largo de la comida. Para ello, las mejores copas de las marcas más exclusivas, de Zalto a Riedel o Lehman, con más de 50 modelos diferentes.
En la cocina innovación y un trabajo de I+D muy elaborado. El menú de temporada cambia cada estación con platos de raíz castellana y productos ecológicos de huerto propio, siempre bajo el prisma de la sostenibilidad. Platos como 'Trucha, jamón y sus huevas', 'Pichón, praliné y cebada' o 'Cangrejo señal y caviar' forman parte de un largo menú maridado con distintos vinos: son en total 16 platos acompañados por 26 vinos y cuyas copas se van dejando en el centro de una amplia mesa como testigos mudos del banquete.
Como no podía ser menos, un equipo de sala impecable y profesional, dirigido por David Robledo (ex Santceloni) permite tal derroche de servicios. Cristóbal Muñoz, el chef de Ambivium, elabora una cocina creativa y delicada pero muy pegada a la tierra como homenaje al territorio. Diego González, Mejor Sumiller de España en 2019, pone el punto perfecto para las armonías con los vinos y dirige el equipo de sumilleres del restaurante. De momento sólo poseen una estrella Michelin… pero llegarán más. Es el momento perfecto para conocerlo.
Manero Alicante, taberna 'cool' y sibarita
Actualmente hay un Manero en Madrid, pero os vamos a hablar de la casa madre, donde surgió el germen de la taberna más cool, chic y auténtica de España. ¿Todo junto?... Siii, el empresario Carlos Bosch junto al cocinero Sergio Sierra lo dejaron muy claro con Manero Alicante, un lugar de ida y vuelta. Porque siempre se vuelve. Los atractivos no son pocos. Una taberna ilustrada para sibaritas- con interiorismo de Lázaro Rosa Violán- que simula una antigua tienda de ultramarinos repleta de productos gourmet. Forma, fondo y contenido singular con sello propio e identidad única.
Para ello Carlos Bosch recorrió España buscando las mejores especialidades en cada rincón, algunas de las cuales se etiquetan bajo el genérico de ‘Manero’ y se pueden comprar (también online). Conservas de primera fila, inmejorables salazones, originales patés, delicados quesos, perfectas gildas, ibéricos puros de bellota… no falta una escogida lista de mariscos (ostras, quisquillas de Santa Pola, gamba roja de Denia, etc.), caviar de tres categorías e, incluso, champagnes etiquetados especialmente para la casa.
Manero Alicante consta de distintas barras donde operan los cocineros que, a su vez, sirven rápido y eficazmente las mesas altas que les rodean. La carta se divide en varios apartados: verduras y ensaladas, montaditos, canapés, tapas tradicionales o el Espai Cru, con steak tartar o el tataki de atún rojo; también algo de oferta de cocina de la mano de Sergio Sierra.
Muy recomendable su deliciosa ensaladilla rusa, rica tostada de huevas de maruca, el ‘bikini’ con trufa o el canapé de sardinillas con pan mollete y mantequilla. No faltan las primorosas croquetas de jamón o rabo de toro, junto a una genuina tortilla de patatas trufada o unos buenos callos. Gran tabla de quesos, con 10 variedades. Cócteles y nutrida carta de vinos nacionales y foráneos (más de 200 referencias). Todo con un selecto menaje, de Laguiole a Riedel entre otros. Siempre lo más exquisito de lo mejor, aunque hablemos de algunas materias primas sencillas.
Manero posee además un Club privado o speakeasy al fondo del local, sólo para socios y exquisitamente decorado, con cócteles, copas y una carta exclusiva de vinos (con los champagnes ‘top’), donde se organizan actividades relacionadas con el mundo de la gastronomía, desde catas a viajes. Sirven cenas o almuerzos para asociados.
Tres restaurantes únicos donde vivirás experiencias muy especiales e inolvidables. Se acercan las fechas festivas y es tiempo de darte un buen homenaje. ¿O no?.
Nota: Ninguno de los restaurantes mencionados se han seleccionado por algún motivo comercial, su elección es una decisión únicamente de calidad y periodística. Los precios son meramente orientativos.
