La prensa alemana informa del acuerdo pero, si se va más allá, deja caer que no cree en el futuro de Grecia dentro de la zona euro. DesdeDüsseldorf, Michael Maisch comenta para Handelsblatt que "los mercados se preparan para el dracma" y cita a un inversor londinense que dice: "si el eslabón más débil de la cadena se va, reforzaría al resto de la Unión". Para el comentarista, todos dan por hecho que Grecia está fuera del euro y "legiones de abogados están ocupados en las complejas implicaciones legales de una ruptura de la zona euro".
Otra columnista del mismo diario económico, Ruth Berschens, mantiene sin embargo un discurso diferente: "Alemania dejó de pagar buena parte de su deuda después de la II Guerra Mundial, ya que EE.UU. renunció en 1953 a más del 60% de la deuda que le debíamos".
"Aún no se ha salvado"
Desde Fráncfort, Frankfurter Allgemeine Zeitung destaca las palabras del titular de Finanzas griego, Evangelos Venizelos: "queremos seguir en la familia del euro". Financial Times Deutschland, por su parte, destaca que "Grecia todavía no se ha salvado". El diario editado en Hamburgo recuerda que la complejidad de funcionamiento de los mecanismos europeos hace que el paquete completo de ayudas deba aún ser refrendado en muchos parlamentos nacionales, algunos de los cuales podrían no estar de acuerdo con seguir dando asistencia a Atenas.
Amplia cobertura
La prensa helena recoge el acuerdo en sus ediciones digitales y le dedica amplia espacio. Por ejemplo, Kathimerini titula su principal información “Acuerdo después de negociaciones maratonianas en el Eurogrupo” y destaca que “tras doce horas de negociaciones” el pacto alcanzado incluye un préstamo de 130.000 millones de euros y un “recorte en el valor nominal de las tenencias de bonos del 53,5% frente al 50% acordado en diciembre” que asciende a 107 millones de euros. También se destacan las declaraciones de el primer ministro griego Lucas Papadimos (“Día histórico”), de su ministro de Finanzas Venizelos (“Hemos llegado a un resultado positivo que no fue ni fácil ni evidente”) y de algunos dirigentes europeos como Jean–Claude Junker (“Este acuerdo es de largo recorrido”), el presidente del BCE (“muy buen negocio”) o de Olli Rehn (“El plan de apoyo griego descansa sobre la base de una estricta condición: establece un control mayor sobre Grecia”).
Reacciones y declaraciones que son desarrolladas: “Los ministros europeos de Finanzas acogieron con agrado el acuerdo” o “El FMI aprobará en marzo ayudar a los griegos". Ethnos, por su parte, tampoco ahorra espacio y cuatro de sus seis noticias más destacadas abordan en grandes titulares lo sucedido en la madrugada del marte. El diario subraya que el acuerdo alcanzado es una “nueva página” y la “última oportunidad” para la economía griega y desgrana todo lo acordado el pasado lunes.
En su editorial, reconoce que el acuerdo “es el alto precio que acompaña a la garantía de la nueva oportunidad que nos brindan, si todos tenemos éxito”. En este sentido, admite que algo tendrán que ver los griegos en su situación por “tantos fracasos y deficiencias de los dos años anteriores”. Destaca que, en esta ocasión, los socios europeos no quieren retrasos en las reformas y por eso ha habido “la imposición de las medidas de control más estrictas posibles, que estamos obligados a promover” y augura que se va a ejercer “el máximo rigor” en este terreno.
Sin embargo, a los europeos les pide que se den cuenta de que el Fondo de Rescate “no es suficiente para poder con la deuda y el déficit”. Finalmente exhorta “a comportarse en esta ocasión con la seriedad y responsabilidad que no se mostraron en los dos últimos años” e invitando a que los europeos se involucren “en el desarrollo” del rescate, para evitar que “renovar sus esfuerzos para rescatarnos”