El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha rebajado este lunes la estimación de muertes por coronavirus en el país norteamericano realizada por su Administración y ha vaticinado que morirán entre 50.000 y 60.000 personas.
Según indicó a finales del mes pasado el principal responsable científico en la lucha contra el coronavirus en Estados Unidos, Anthony Fauci, unas 100.000 personas morirían por el Covid-19 en el país. Hasta el momento, Estados Unidos ha registrado un total de 41.872 víctimas mortales, según el balance de la Universidad Johns Hopkins.
"Ahora vamos hacia las 50.000 o 60.000 personas. Es demasiado, pero vamos hacia 50.000 o 60.000 personas. Eso es inferior, se suponía que el final de las proyecciones debían ser 100.000 personas", ha indicado Trump durante la rueda de prensa diaria del grupo de trabajo del coronavirus en la Casa Blanca.
En este sentido, ha defendido su gestión de la crisis y ha precisado que si su Administración no hubiera tomado medidas, el número de muertos se habría incrementado notablemente.
"Si no hubiéramos hecho lo que hemos hecho, habríamos tenido, creo, un millón de personas (fallecidas), tal vez dos millones de personas, tal vez más que eso", ha aseverado, según ha recogido la cadena de televisión 'CNN'.
El gobiernador de Nueva York ha solicitado en varias ocasiones recursos a la Administración y que Trump dé una verdadera respuesta a la crisis
Por otra parte, Trump ha anunciado que el gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo, se reunirá con él este martes en la Casa Blanca.
"Creo que el gobernador vendrá a vernos mañana. Vendrá al Despacho Oval mañana por la tarde", ha trasladado el presidente estadounidense, al tiempo que ha asegurado que "lo están logrando en Nueva York, están sucediendo muchas cosas buenas en Nueva York".
El gobernador de Nueva York, crítico con Trump
Trump y Cuomo han protagonizado varios desencuentros en el marco de la gestión de la pandemia del coronavirus. Cuomo ha solicitado en varias ocasiones recursos a la Administración estadounidense y que el mandatario dé una verdadera respuesta a la crisis sanitaria desatada por el Covid-19.
Además, el gobernador ha sido especialmente crítico con los planes de Trump de tener el país abierto para el 1 de mayo. En este sentido, llegó a afirmar que Estados Unidos tiene "una Constitución, no un rey" frente a las declaraciones de Trump sobre su autoridad "total" para decidir cuándo levantar las medidas de contención adoptadas por los estados para contener la pandemia.
Pruebas del coronavirus
No obstante, Trump ha sugerido este lunes que algunos gobernadores no entienden "completamente" qué recursos tienen a su disposición para luchar contra el coronavirus, aludiendo especificamente a los de Maryland e Illinois, Larry Hogan y Jay Pritzker, respectivamente.
El comentario se ha producido después de que el vicepresidente estadounidense, Mike Pence, haya hablado con los gobernadores y les haya proporcionado una lista con nombres, direcciones y teléfonos de laboratorios que pueden ayudar en la realización de pruebas diagnósticas adicionales.
El Gobierno estaba cerca de sellar un acuerdo con una compañía para la fabricación mensual de 20 millones de bastoncillos
En este contexto, el presidente estadounidense también ha asegurado que "realmente no necesita" invocar la Ley de Producción de Defensa para asegurar la fabricación de bastoncillos para pruebas de coronavirus, algo en lo que afirmó estar trabajando un día antes.
En concreto, explicó que el Gobierno estaba cerca de sellar un acuerdo con una compañía para la fabricación mensual de 20 millones de bastoncillos, un material del que se ha tenido carencias, de acuerdo con las quejas de muchos gobernadores, que han criticado la falta de herramientas para poder llevar a cabo las pruebas del Covid-19.