Estados Unidos y Reino Unido han decidido iniciar de manera formal las negociaciones bilaterales para acordar un tratado de libre comercio entre ambas naciones, según han informado el representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, y la secretaria de Estado de Comercio Internacional de Reino Unido, Elizabeth Truss e informa Europa Press.
Debido a la situación causada por la pandemia de la covid-19, ambas potencias han explicado que la primera ronda de negociaciones entre Londres y Washington se realizará de manera virtual. Durante las dos próximas semanas, desde el 6 al 15 de mayo, los negociadores participarán en discusiones y debates en cerca de 30 reuniones que cubrirán "todos los aspectos" del acuerdo comercial.
Ambas partes han subrayado que el tratado de libre comercio contribuirá a la "salud a largo plazo" de sus economías, lo que es "de vital importancia" ante la recuperación de los desafíos planteados por la pandemia.
De esta forma, la rúbrica de un tratado del libre comercio es la "prioridad" para ambos países, que han asegurado que comparten el "compromiso" de lograr un acuerdo "ambicioso" que incremente de forma significativa la inversión y el comercio.
Un acuerdo "ambicioso"
"Bajo el liderazgo del presidente Trump, Estados Unidos negociará un acuerdo ambicioso y de altos estándares con Reino Unido que fortalecerá nuestras economías, apoyará empleos bien remunerados y mejorara sustancialmente las oportunidades de comercio e inversión entre nuestros dos países", ha afirmado Lighthizer.
"Estados Unidos es nuestro mayor socio comercial y el mayor comercio transatlántico puede ayudar a nuestras economías a recuperarse del desafío económico planteado por el coronavirus. Queremos cerrar un acuerdo ambicioso que abra nuevas oportunidades para nuestras empresas, traiga más inversión y cree nuevos empleos para personas de todo el país", ha agregado Truss.
El equipo negociador de Estados Unidos estará liderado por el asistente del representarte comercial para Europa y Oriente Próximo, Dan Mullaney, mientras que el británico estará encabezado por el director para negociaciones con Estados Unidos del Departamento de Comercio Internacional, Oliver Griffiths. Entre ambos el personal negociador superará las 200 personas.
El volumen comercial entre ambos países se sitúa en torno a los 269.000 millones de dólares (248.122 millones de euros) al año. Asimismo, cada país es la principal fuente de inversión directa del otro, con cerca de un billón de dólares (922.388 millones de euros) de inversión al año.