Con el objetivo de llevar a Brasil "el concepto de lo lúdico de los parques de Disney" Paulo Meirelles y Mauro Morata, socios de Soft Love Brasil, han decidido abrir el primer parque erótico del país.
El proyecto, que ha contado con una inversión de unos 80 millones de reales, se construirá en un área de 150 mil metros cuadrados y contará con un aforo capaz de albergar a unas 3.000 personas. Las atracciones que podrán disfrutar los visitantes será tan diversas y originales como un tren de los placeres, una piscina nudista donde estaría prohibida la práctica del sexo - al igual que en el resto del parque- o coches de choque con forma de genitales.
También se podrá visitar un museo erótico en el que se podrá explorar la historia de la sexualidad y promover el uso del condón. También habrá un "campo de juego de sexo", y contará con un laberinto, una rueda gigante y un tobogán.
Los promotores buscan promover un enfoque sexual sano
Sin embargo, a pesar de lo que se pueda pensar a primera vista, no se trata de un parque pornográfico. La idea, según los organizadores es promover un enfoque sexual sano. Para asegurarse de que ningún visitante protagonice ninguna situación que pueda resultar incómoda para el resto de turistas el proyecto cuenta también con la construcción de hoteles en los alrededores.
El punto concetro en el que se abrirá el parque se mantiene por lo pronto en secreto para "evitar la especulación y no servir como una plataforma política oportunista", según ha explicadoel presidente de Soft Love, Mauro Morata. Lo que si ha confirmado es que la apertura tendrá lugar a principios de 2018 en la región de Piracicaba, a una hora y media de Rio Janeiro.