El ex contratista de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) estadounidense Edward Snowden ha anunciado este viernes que acepta todas las ofertas de asilo realizadas por países latinoamericanos pero por el momento, a la espera de conseguir una vía segura para poder viajar a estos países, solicitará asilo a Rusia y ha confiado en que se lo dé.
"Algunos gobiernos en Europa Occidental y Norteamérica han demostrado la voluntad de actuar al margen de la ley", ha señalado Snowden, durante el encuentro mantenido con defensores de los Derechos Humanos en el aeropuerto de Moscú en el que se encuentra desde el 23 de junio, según el comunicado con su declaración publicado por WikiLeaks, en referencia a la decisión de varios países europeos de no permitir la semana pasada que el avión del presidente boliviano, Evo Morales, sobrevolara su espacio aéreo.
"Esta amenaza ilegal hace imposible que pueda viajar a Latinoamérica y gozar del asilo garantizado allí de acuerdo con nuestros derechos compartidos", ha lamentado, tras anunciar que aceptaba "todas las ofertas de apoyo o asilo" que le han hecho países como Venezuela, Bolivia, Nicaragua o Ecuador.
Snowden se ha mostrado particularmente agradecido al presidente venezolano, Nicolás Maduro, ya que con su oferta de darle asilo ha hecho que su estatus de "asilado sea ahora formal" y por tanto "ningún país tiene una base sobre la cual limitar o interferir en mi derecho de gozar de ese asilo".
Ante estas circunstancias, ha pedido a los defensores de los Derechos Humanos con los que se ha reunido, entre los que había representantes de Human Rights Watch y de Amnistía Internacional, que su "ayuda para pedir garantías de paso seguro por varios países para garantizar mi viaje a Latinoamérica, así como para solicitar asilo en Rusia hasta que llegue el momento en que estos países acepten la ley y permitan mi viaje legal".
"Hoy presentaré mi solicitud (de asilo) a Rusia y espero que será aceptada de forma favorable", ha anunciado, de acuerdo con su declaración dada a conocer por Wikileaks. El ex analista ha expresado su intención de "viajar a cada uno de los países" que le han ofrecido para darles las gracias por haberse "levantado contra las violaciones de los Derechos Humanos llevadas a cabo por los poderosos".
Snowden se reafirma
El ex trabajador de la NSA ha defendido su decisión de filtrar documentos secretos que han puesto al descubierto varios programas de Estados Unidos para vigilar no solo a sus ciudadanos sino a los ciudadanos de otros países del mundo e incluso a sus gobiernos, además de las instituciones de la Unión Europea.
"Hice lo que creía que era lo correcto y comencé una campaña contra esta actuación indebida" por parte del Gobierno estadounidense, ha señalado, asegurando que no busca "enriquecerme" ni "vender los secretos de Estados Unidos". Asimismo, ha asegurado que no ha trabajado con el Gobierno de ningún país "para garantizar mi seguridad".
"En lugar de ello, cogí lo que sabía para dárselo al público con el fin de que lo que nos afecta a todos nosotros pueda ser discutido por todos a plena luz del día, y pedí al mundo justicia", ha relatado, reconociendo que "esa decisión moral de contar el espionaje que nos afecta a todos nosotros ha sido costosa pero fue lo correcto y no lo lamento".
Snowden ha criticado que el Gobierno de Estados Unidos le haya incluido en la lista de las personas a las que no se permite volar y que "haya amenazado con sanciones a países que han defendido sus derechos humanos y el sistema de asilo de la ONU".