El líder de las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), Mohamed Hamdan Dagalo, alias 'Hemedti', ha avanzado que no emprenderá negociaciones con el Ejército sudanés para poner fin al conflicto en el país africano hasta que los militares no dejen de bombardear las posiciones de sus efectivos.
En declaraciones a la BBC, 'Hemedti' ha denunciado que el Ejército sudanés lleva bombardeando "de manera implacable" a sus fuerzas paramilitares desde la última ampliación de la tregua el jueves por la noche.
'Hemedti' responde así a comentarios de su gran rival, el líder del Ejército sudanés Abdelfatá al Burhan, quien se ha abierto a la posibilidad de conversaciones cara a cara en Sudán del Sur.
"Primero, que cese las hostilidades y luego hablamos", ha declarado el cabecilla paramilitar a la cadena británica, donde ha reiterado su convencimiento de que Al Burhan está persiguiendo la reintegración de elementos próximos al derrocado dictador Omar al Bashir.
"Desafortunadamente, Burhan está siendo dirigido por los líderes del frente islámico radical", ha añadido Hemedti, en la repetición de otra de sus largas quejas como es la existencia de elementos islamistas entre las filas del Ejército y del organismo golpista que compartía con Al Burhan antes del enfrentamiento, el Consejo Soberano de Transición.
El líder paramilitar aprovechó para negar acusaciones de Naciones Unidas sobre presuntos saqueos cometidos por las fuerzas paramilitares y acusó a los militares de emplear uniformes de las milicias para desacreditar a las RSF.
"Lo que estamos haciendo es trabajar para restablecer el suministro de agua y electricidad en las zonas que tenemos bajo nuestro control. Lamentablemente, todos los técnicos e ingenieros han desaparecido. Ese es nuestro principal problema", ha aseverado.