No fue educada para ser reina, pero el destino tenía previsto para ella uno de los reinados más largos de la historia. Tras 70 años como monarca, el pasado 8 de septiembre, la reina Isabel II fallecía a los 96 años en el Castillo de Balmoral rodeada de sus hijos y sus nietos.
Durante décadas, la Reina ha sido la cabeza de una de las familias más conocidas y distinguidas del mundo, pero también una de la que más escándalos ha protagonizado. Convertidos en el centro de todas las miradas, todos y cada uno de los miembros de la familia real británica ha ofrecido al mundo sonadas polémicas que han aumentado la expectación por ellos.
Fue en 1952 cuando, tras la muerte de su padre, el rey Jorge VI, Isabel se convirtió en reina, dando inicio al reinado más longevo de Reino Unido. Siete décadas plagadas de escándalos que incluso han saltado al cine y la televisión.
El duque de Edimburgo, el gran amor de la reina Isabel II
Se conocieron cuando ella tan solo tenía 13 años y él 18, y tras un intenso romance, el 20 de noviembre de 1947, se casaron en una gran boda celebrada en la Abadía de Westminster. Isabel II y Felipe de Edimburgo protagonizaron uno de los matrimonios más longevos, que duró hasta la muerte del duque en abril de 2021.
Sin embargo, su relación estuvo plagada de rumores y escándalos, protagonizados generalmente por las comentadas juergas e infidelidades de Felipe. Unas especulaciones con las que la reina Isabel II tuvo que convivir durante años.
Otro de los escándalos que salpicó al duque de Edimburgo estuvo relacionado con un accidente de tráfico en el que el vehículo que él conducía chocó con otro en el que viajaban dos mujeres y un bebé. Por entonces, el marido de la Reina tenía 97 años, algo que fue criticado por la opinión pública.
La relación del príncipe Carlos y Camilla Parker
Es probable que uno de las mayores preocupaciones de la reina Isabel II haya sido la eterna relación entre su hijo, el príncipe Carlos, y Camilla Parker. Una relación que comenzó cuando eran jóvenes y que nunca dejaron, ni siquiera cuando el eterno heredero contrajo matrimonio con Lady Di.
Convertida en una de las infidelidades más famosas de la historia, la relación entre el ahora rey Carlos III y su actual mujer acaparó la atención de los medios de todo el mundo.
Lady Di, la princesa del pueblo
Mucho se ha hablado de la relación entre Diana Spencer y Carlos de Inglaterra. Una relación que aunque se vendió como un cuento de hadas, no fue más que un infierno para la propia Diana de Gales, convertida en la querida princesa del pueblo. En pocos años, la nuera de la reina Isabel II consiguió el cariño y apoyo del pueblo, según aseguran, en detrimento de la propia monarca.
Poco después de su separación del príncipe Carlos, lo que supuso un escándalo en Inglaterra, Lady Di ofreció una inolvidable entrevista para la cadena BBC, en la, además de desvelar todo el sufrimiento de su matrimonio, pronunció la demoledora frase confirmando la infidelidad de su marido: “éramos tres en ese matrimonio, así que estaba un poco abarrotado”.
La siempre rumoreada mala relación entre Lady Di y la reina Isabel II también ocasionó más de un problema para la monarca, al igual que las relaciones e incluso supuestas infidelidades de Diana. Inevitablemente, la trágica muerte de Diana Spencer el 31 de agosto de 1997 en París hizo que todas las miradas (y sobre todo la rumorología) se posaran sobre el Palacio de Buckingham.
Las polémicas del príncipe Harry
Mucho antes del su matrimonio con Meghan Markle, el príncipe Harry protagonizó varios escándalos que le convirtieron en el nieto problemático de la reina Isabel. Durante años, la prensa internacional se hizo eco de las fiestas con excesos del hijo mayor de Carlos y Diana llegando incluso a publicarse unas imágenes en las que el príncipe Harry aparecía disfrazado de nazi que dieron la vuelta al mundo, y por las que tuvo que pedir perdón.
Meghan Markle
Poco podía imaginarse la reina Isabel II todo lo que acontecería tras la boda del príncipe Harry y Meghan Markle. Y no solo por la comentada mala relación de la exactriz con Kate Middleton, lo que según algunos provocó un distanciamiento entre Harry y su hermano, el príncipe Guillermo.
Unos años después de su boda, celebrada el 19 de mayo de 2018 en la capilla de San Jorge del Castillo de Windsor, el príncipe Harry y Meghan Markle decidían alejarse de Inglaterra y de la familia real, poniendo rumbo a Estados Unidos. Tras esta decisión, que supuso todo un escándalo, el matrimonio ofrecía una entrevista a Oprah Winfrey en la que desvelaban, entre otras cosas, los supuestos episodios de racismo y desprecio sufridos por Meghan Markle durante sus años junto a la familia real británica.
1992, el ‘Annus Horribilis’ de la reina Isabel II
Fue el 24 de noviembre de 1992 cuando en uno de sus discursos, la reina Isabel II calificó ese año como su “Annus Horribilis”. Unos días antes, un incendio devastaba el Castillo de Windsor, algo que afectó mucho a la monarca. Además, fue precisamente en 1992 cuando los matrimonios de los tres hijos de la Reina naufragaron.
Tras meses de rumores, el diciembre de 1992, el príncipe Carlos y Ladi Di anunciaban su separación. Meses antes, lo hicieron el príncipe Andrés y Sarah Ferguson. Ese año también llegó el divorcio oficial de la princesa Ana y Mark Anthony Phillips, separados tiempo atrás.
Sarah Ferguson
En julio de 1986 se casaba el príncipe Andrés con Sarah Ferguson, quienes se separarían seis años después. Aunque la expareja siempre se ha mostrado cercana y unida, algo que aseguran no contaba con el beneplácito de la reina Isabel II, fueron algunos aspectos de la nueva vida de Sarah Ferguson los que molestaron a la Casa Real.
Además de algunas de las espontáneas declaraciones de la exduquesa de York, que fueron de lo más cuestionadas, la publicación de unas imágenes en las que Sarah Ferguson aparecía en topless junto a su asesor financiero, John Bryan, quien le chupaba los pies, fue todo un escándalo en Inglaterra.
El príncipe Andrés, denunciado por abuso sexual a menores
Los últimos años de Isabel II tampoco fueron nada fáciles. Pero sin duda, la denuncia que recibió su hijo, el príncipe Andrés, por abuso sexual a menores, fue uno de los escándalos más duros para la monarca y que hizo temblar los cimientos del Palacio de Buckingham.
La comentada amistad del duque de York con Jeffrey Epstein, acusado por tráfico de menores, ocupo los titulares de todo el mundo. En septiembre de 2021, el príncipe Andrés era formalmente denunciado por Virginia Giuffre quien aseguraba que había sido obligada a mantener relaciones sexuales con el hijo de la reina Isabel II cuando ella tenía 17 años.
En febrero de 2022 se aseguró que el duque de York había llegado a un acuerdo extrajudicial, por el que aseguraron pagó 14 millones de euros.
La no tan discreta vida de la princesa Ana
Probablemente una de las más discretas de la familia real británica, la única hija de la reina Isabel II también ha protagonizado algún que otro escándalo relacionado con sus relaciones sentimentales y los rumores de infidelidad.
Fue en 1989 cuando se supo que la princesa Ana y su por entonces marido, Mark Phillips, dejaban de compartir techo, aunque su divorcio no llegó hasta 1992. Durante años se aseguró que ambos habían mantenido relaciones extramatrimoniales, algo que se confirmó en 1991 cuando una prueba de ADN desveló que el capitán tenía una hija nacida en 1985.
La hija de la reina Isabel II también mantuvo sonados romance, incluido el que la relacionó con su guardaespaldas, y pocos meses después de conseguir el divorcio, se casó con Timothy James Laurence.
El escándalo de Kate Middleton
Considerada una de las más discretas y queridas de la familia real, Kate Middleton puede presumir de tener un currículum casi impecable. Y decimos casi porque la opinión pública no vio con buenos ojos la publicación de unas imágenes en topless.
Fue en 2012 cuando, durante unas vacaciones en Francia junto al príncipe Guillermo, la duquesa de Cambridge fue fotografiada dentro de una propiedad privada en topless fumándose un cigarro. Los duques denunciaron a la publicación.