El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció este viernes la revisión de "todas las relaciones" de su país con España, en respuesta a la actitud del presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, en relación con la oposición venezolana.
"Yo le he ordenado al vicepresidente político y canciller, Rafael Ramírez, revisar todas las relaciones con España por este acto inamistoso, de injerencismo y de apoyo a los grupos de ultraderecha que ejercen la violencia en Venezuela por parte del señor Rajoy", afirmó Maduro en un acto oficial.
"Respete a Venezuela como nosotros respetamos al pueblo español", ha advertido Maduro, que ha insistido en que para su Gobierno es "sagrado" el respeto a la "vida interna" de otros países.
Maduro evidencia así el malestar que ya había expresado el jueves el Ministerio de Exteriores de Venezuela, que tachó de "irresponsable e irrespetuosa" la reunión entre Rajoy y la mujer de López, Lilian Tintori. En este encuentro, el dirigente español trasladó la preocupación de la UE por el juicio al líder de Voluntad Popular.
Caracas reclama al Gobierno de España que no se involucre en la causa judicial, que --según añade la nota-- se desarrolla "de manera independiente y soberana en tribunales venezolanos". López está siendo juzgado por los delitos de daño, incendio, instigación y asociación para delinquir, por los que podría ser condenado a hasta diez años de cárcel.
Los hechos se remontan al 12 de febrero, cuando miles de personas salieron a las calles de Caracas para protestar contra el Gobierno de Maduro y decidieron marchar hacia la Fiscalía, donde fueron interceptados por los grupos armados afines al Ejecutivo, dando lugar a un duro enfrentamiento.
Las autoridades venezolanas consideran que López es el "autor intelectual" de estos disturbios, que marcaron el inicio de la actual crisis --que se ha saldado con 43 muertos, cerca de un millar de heridos y cientos de detenidos--, por convocar la marcha hacia la Fiscalía.