Han pasado solo unas horas desde que Donald Trump ha ganado las elecciones presidenciales en Estados Unidos y el ya presidente electo ha hecho público un paquete de medidas para llevar a cabo en sus primeros cien días al frente de la primera potencia mundial. Estas acciones que quieren que sean "su contrato con el votante americano para llevar el cambio a Washington.
La corrupción será la primera de sus preocupaciones. En este apartado propone seis acciones principales. Entre ellas, la limitación de mandatos de los miembros del Congreso, la congelación de sueldos de los empleados públicos o evitar las puertas giratorias durante un periodo de cinco años para que los representantes públicos no puedan ejercer de lobistas en empresas privadas. Otra de las medidas que impulsará será precisamente que los lobistas no puedan aportar fondos a las campañas presidenciales.
Para los trabajadores, tiene intención de anunciar que no renegociará el NAFTA, retirará a Estados Unidos de la negociación del TTIP, cancelará los pagos del país al programa de contra el cambio climático de la ONU y atajará las restricciones de producción sobre las reservas de gas y petróleo.
Y en el ámbito de la seguridad nacional, pretende cancelar las acciones "inconstitucionales" impulsadas por la Administración Obama, la renovación de miembros en la Corte Suprema y la restricción de la inmigración de personas procedentes de "regiones propensas al terrorismo" siempre que no se pueda asegurar la seguridad del país.