La jueza cautelar de la ciudad boliviana de Santa Cruz Livia Alarcón ha dictado seis meses de prisión provisional contra Diego V. y Freddy C., los dos estibadores de la aerolínea estatal Boliviana de Aviación (BOA) por el envío de 478 kilos de cocaína a Madrid, España, en febrero de este año.
Los dos fueron grabados por las cámaras de seguridad el 10 de febrero en el aeropuerto de Viru Viru cuando rompieron los precintos de un contenedor para introducir en un avión alquilado por BOA doce cajas de cartón en las que estaban los ladrillos de cocaína.
Estas son las dos primeras detenciones realizadas después de que las autoridades españolas informaran del hallazgo de los paquetes con droga en el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas.
La fiscal del caso, Rocío Medrano, ha imputado a los dos sospechosos los delitos de confabulación y asociación delictiva mientras avanzan las investigaciones sobre la procedencia de la carga ilícita y par concretar qué otros funcionarios y de qué instituciones fueron cómplices del tráfico.
El cargamento tuvo que burlar al menos cuatro dispositivos de seguridad o contar con la complicidad de los funcionarios para superar el control de pasajeros y carga, el monitoreo de las cámaras de seguridad, el control de la carga con los escáner de la Aduana Boliviana y la revisión de los paquetes por las unidades caninas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico.