El líder norcoreano, Kim Jong-un, reapareció este sábado por primera vez en 21 días en los medios de propaganda estatal y zanjó así la incertidumbre generada por informaciones que hablaron sobre la supuesta gravedad de su estado de salud o que incluso afirmaron que había fallecido.
Los medios oficiales informaron de la asistencia de Kim y otros miembros de peso del régimen a una ceremonia que tuvo lugar en la víspera, importante festividad en el país, para celebrar la finalización de la construcción de una planta de fertilizantes fosfatados en Sunchon (unos 50 kilómetros al noreste de Pionyang).
La agencia estatal KCNA publicó varias fotografías para ilustrar el acto, en el que Kim, luciendo un traje negro estilo Mao y moviéndose aparentemente sin ninguna ayuda, cortó la cinta inaugural y visitó diversos puntos de las instalaciones, que llevaban al menos dos años en construcción (según revelan fotos por satélite).
Le acompañaron su hermana, Kim Yo-jong, el vicepresidente del Comité Central del Partido de los Trabajadores, Pak Pong-ju, o el primer ministro, Kim Jae-ryong.
El líder norcoreano expresó su "satisfacción por la maravillosa construcción" que "refuerza las tareas y capacidades para desarrollar la industria química" del país, según la nota publicada por KCNA.
Primera aparición en 21 días
Esta ha sido la primera aparición pública en 21 días del líder norcoreano, que en ese lapso no asistió a varios eventos importantes, incluidos los del 15 de abril, la festividad más destacada del país.
A esto se unió el que la última actividad sobre el terreno de Kim reportada por la propaganda norcoreana fue una reunión celebrada el pasado 11 de abril en la que el dictador nombró a su hermana miembro suplente del poderoso buró político del Partido de los Trabajadores, algo interpretado como un gesto destinado a preparar su sucesión.
En ese contexto, marcado a su vez por la pandemia de coronavirus y la tradicional opacidad del régimen norcoreano, distintos medios publicaron informaciones, citando siempre fuentes anónimas, en las que se hablaba de la supuesta gravedad de la salud de Kim, de hipotéticas operaciones de corazón o de que incluso el líder habría fallecido.
Hasta un desertor norcoreano que resultó elegido como parlamentario en el Sur, Ji Seong-ho, llegó a decir en la víspera que estaba "seguro en un 99%" de que Kim había muerto de acuerdo a lo que le habían contado contactos suyos en el Norte.
Trenes y barcos
A su vez, fotos por satélite mostraron hace días en la ciudad de Wonsan (costa oriental) la presencia de trenes y embarcaciones normalmente utilizados por Kim, al tiempo que el Gobierno de Corea del Sur restó credibilidad a estas informaciones.
Seúl señaló que la ausencia pública de Kim podía deberse al interés del régimen por reducir la escala de grandes eventos en Pionyang en el marco de sus esfuerzos por combatir el coronavirus.
En ese sentido, y pese a que el hermético país ha asegurado que no ha detectado un solo contagio en su territorio, las imágenes de KCNA mostraron hoy a los numerosos trabajadores de la planta de Sunchon que se congregaron durante el acto usando mascarillas.
No es la primera vez que Kim, que sufre aparentemente de obesidad y parece ser un fumador empedernido, se ausenta del ojo público durante varios días.
De hecho, es la tercera vez que el líder se ausenta de los medios norcoreanos este año durante un lapso de más de 10 días.
En septiembre de 2014 se ausentó durante 40 días y reapareció cojeando, algo que según la inteligencia surcoreana respondió a una operación de tobillo.
Hito agrícola
Más allá de la ausencia de Kim de los focos, la apertura de la planta de fertilizantes constituye un evento importante (el acto ocupó las dos primeras páginas del principal diario nacional, el Rodong) para el sector agrícola.
Especialmente en un momento en que el empobrecido país, que cerró fronteras a cal y canto desde enero por el coronavirus, podría estar encarando escasez de divisa extranjera derivada de ese cierre.
Esto a su vez podría estar limitando sus importaciones de alimentos, tal y como mostraron los datos de las aduanas de China, su principal socio, que en marzo apenas exportó comida a su vecino.
Los organismos de la ONU siguen manteniendo que el 10% de los 25 millones de habitantes de Corea del Norte requerirán de asistencia alimentaria externa este año.