La supuesta hija ilegítima del rey Alberto de Bélgica ha concedido una entrevista en Paris Match, en la justifica que "No he tenido más remedio que llevar a la justicia a mi padre", el Rey Alberto de Bélgica. Delphine Böel, que ha reconocido que la relación con su padre es "nula", a escasos días de que la justicia belga comience a atender su solicitud de paternidad.
Böel ha destacado de su padre que "no es el mejor ejemplo de cristiano", preguntada sobre si su fe cristiana le conecta con su padre. "No he tomado a la ligera la decisión de demandar a mi padre", ha declarado tajante a esta revista del corazón francesa. Dice que ha habido muchos "hechos desagradables" que le han motivado a tomar esta decisión.
La escultora belga, hija de un millonario industrial y de la baronesa Sybille de Selys Longchamps, afirma ser hija ilegítima del rey Alberto de Bélgica y solicitó un test de paternidad para confirmarlo. El soberano y la madre de la demandante habrían tenido un 'affaire' que, al parecer duró varios años. Delphine ha solicitado ante la Justicia belga ser reconocida como la cuarta hija del Rey belga después de ser desheredada por su padre. El día 23 comienza la vista de su caso, en el que se dilucidará si es o no hija legítima del rey de los belgas.
La baronesa Sybille de Selys-Longchamps comenzó una relación amorosa con el príncipe de Lieja en 1967, estando ambos casados, y un año después nació Délphine, cuya existencia se hizo pública en 1999 a raíz de la publicación de una biografía no autorizada de la reina Paola.
La plçemica en la que se vio envuelto el antiguo monarca después de que Böel solicitase pruebas de ADN para demostrar su parentesco con el monarca, precipitó su abdicación el pasado julio.