Las sanciones bilaterales que se han impuesto mutuamente Estados Unidos y China entran en vigor este lunes, una medida que refleja la última escalada de tensiones dentro de la guerra comercial que se ha desarrollado en los últimos meses entre las dos economías más grandes del mundo.
Las sanciones estadounidenses, que tendrán un valor de 200.000 millones de dólares en bienes chinos, y las consecuentes sanciones chinas, por un valor de 60.000 millones de dólares, se han activado este lunes a las cuatro de la madrugada, hora española.
Ambas potencias ya intercambiaron sanciones económicas por un valor de 50.000 millones de dólares a principios de año. A pesar de que la Casa Blanca esta semana afirmó que continuaría cooperando con China en la búsqueda de "una vía positiva hacia delante" ninguno de los dos países ha mostrado intención de llegar a un acuerdo.
El Gobierno chino ha pedido a Estados Unidos que "corrija de inmediato su error y anule las sanciones"
No obstante, aún no se ha programado ningún tipo de reunión para negociar una posible tregua. Varios medios estadounidenses han informado de que China, que ha acusado a Washington de actuar de manera deshonesta en las negociaciones comerciales, había decidido no enviar al viceprimer ministro chino, Liu He, a la capital norteamericana como estaba previsto.
Receso en el crecimiento global
Los economistas han advertido en varias ocasiones que si la situación no se desbloquea podría implicar un importante receso en el crecimiento económico global. Las tensiones comerciales, por otro lado, ya se han traducido al plano político, donde ambas potencias han comenzado a tomar represalias la una contra la otra.
Este viernes, el Gobierno chino convocó al embajador estadounidense en Pekín y canceló un encuentro de tres días entre los ejércitos de ambos países en protesta por las recientes sanciones impuestas por Washington por la compra de aviones de combate y misiles tierra-aire rusos.
El Gobierno chino ha pedido a Estados Unidos que "corrija de inmediato su error y anule las sanciones". "El Ejército chino se reserva el derecho a adoptar mayores represalias", informó entonces la televisión pública china CCTV.