La Fiscalía de Suecia ha anunciado este sábado de madrugada que el varón detenido este viernes en el norte de la capital, Estocolmo, por su presunta relación con el atropello cometido este viernes en una calle comercial del centro de Estocolmo, que ya ha sido definido como un atentado terrorista, es sospechoso de "delitos de terrorismo por asesinato".
En declaraciones a la emisora estatal Sveriges Radio, la titular de la Fiscalía, Karin Rosander, ha confirmado que el varón, de 39 años, es sospechoso de este delito y ha indicado que el sábado por la mañana se presentará ante el tribunal de guardia la solicitud para destinarle un abogado de oficio para su defensa. Asimismo, ha indicado que es de nacionalidad uzbeka.
El sospechoso, detenido en la zona de Marsta con heridas leves, habría confesado ya a las autoridades ser el conductor del camión que arrolló a un grupo de personas en la zona de Drottninggatan, según fuentes citadas por el periódico Aftonbladet.
Por otro lado, Rosander no ha confirmado la detención de una segunda persona, que la cadena SVT Nyheter anunció poco antes. Fuentes policiales indicaron a esta emisora que otro varón había sido detenido en el suburbio de Hjulsta, a unos 20 kilómetros al noroeste del centro de Estocolmo. Según estas fuentes, se baraja la hipótesis de que exista un vínculo entre los dos detenidos, ambos varones.
El portavoz de la Policía, Towe Hägg, tampoco ha confirmado pero no ha desmentido esta información, que ha salido poco después de que la Policía sueca advirtiera de que no emitiría ningún nuevo comunicado sobre el ataque hasta el sábado por la mañana.
El atropello, cometido poco antes de las 15.00 horas, se ha saldado con al menos cuatro muertos y 15 heridos, según un nuevo balance confirmado por la Policía. El camión había sido robado este mismo viernes a un repartidor de bebidas y terminó embestido en unos grandes almacenes, tras provocar el caos en la zona.
La huida del conductor obligó a la Policía a activar todas las alarmas e instar a los ciudadanos a evitar la zona centro de Estocolmo --una recomendación que han repetido a última hora del día--. El transporte público también ha quedado paralizado durante horas y se ha ido reanudando progresivamente, aunque los trenes seguían sin parar en las dos estaciones más cercanas al lugar del ataque.
Terrorismo
"Suecia ha sido atacada. Todo apunta a un acto de terrorismo", ha advertido el primer ministro, Stefan Lofven, en una primera comparecencia ante los medios. Lofven ha asegurado que el Gobierno está al tanto de lo ocurrido y hace "todo lo posible" para tratar de esclarecer el incidente.
El responsable de la Policía de Seguridad sueca (SAPO), Anders Thorngren, ha afirmado en rueda de prensa que no existía ningún indicio que hiciese temer un atentado de forma inminente, aunque ha apuntado que precisamente esta semana se había ensayado "un escenario similar" al de este viernes. "La SAPO se centra en la información de Inteligencia y en averiguar quién podría estar detrás", ha añadido Thorngren, según medios locales.