Durante la temporada estival el cabello es el que más sufre debido a las largas exposiciones solares, el salitre del mar y el cloro de las piscinas. Factores que arrasan durante estos meses dejando el pelo seco, débil, opaco y sin brillo. Para que esto no ocurra, debemos incrementar los cuidados capilares haciendo un hincapié extra en las siguientes medidas:
1. Olvídate del secador: aprovecha las altas temperaturas y deja que tu melena se seque al aire. De esta forma, tu cabello respirará y podrá mantener su estado natural.
2. Utiliza un protector solar: la protección contra la radiación ultravioleta no se aplica solo en la piel. El cabello también se puede ver afectado, por lo que conviene aplicar un spray protector antes de la exposición y es recomendable utilizar sobrero o envolver la melena en un pañuelo si no eres de los que se ponen debajo de la sombrilla.
3. Opta por un champú suave: deja los champús más fuertes para el invierno y descarta por completo los agresivos. Así conseguirás reducir la sequedad.
4. Menos lavados: disminuir la sequedad también es posible si en lugar de lavar tu cabello un día sí, un día no lo haces dos veces por semana.
5. No lo ates si está húmedo: con este calor la coleta es la opción más cómoda, pero hay que tener en cuenta que recogerlo nada más salir del agua en la playa o en la piscina o nada más ducharse puede contribuir a que la humedad se acumule, deshidratándolo y estropeándolo.
6. No te tiñas ni te des meches: además de que el color variará debido al cloro y a la sal, las decoloraciones debilitan el pelo.
7. No te despegues de la mascarilla: haz aplicaciones de 20 minutos cada dos días. Así facilitarás el desenredado al mismo tiempo que nutres y proteges tu cabello.
8. Pégate un corte cuando vuelvas de vacaciones. Si no te apetece un cambio de look al menos córtate las puntas. Bastará con tres o cuatro centímetros para sanear.